DESAIRE
Por: José Luís Santana Ochoa
Frustrado porque tronó la non santa alianza política que en mala hora para él hizo con el ajonjolí de todos los moles partidistas, Nabor Ochoa López; con el fulminantemente cesado como Director General de la Administración Portuaria Integral de Manzanillo, APIMAN, Jesús Orozco Alfaro; y con el traiciones mil Francisco Zepeda González, el presidente municipal priista de Villa de Álvarez, Enrique Rojas Orozco, no se dignó presentarse en el recibimiento que en el escenario de las Fiestas de Mayo de Manzanillo 2014 ofreció su administración a los 700 porteños que el sábado anterior asistieron al sarao quedándose muchos de ellos con hambre y con sed porque fueron insuficientes la birria y la cerveza, garrafal falla imputable a la tacañez de Kike.
Rojas Orozco asumió el compromiso del recibimiento sabatino antes de que hiciera agua el “tándem político” Nabor-Chucho- Pico-Kike, que según sus interesados porristas periodísticos afincados en Manzanillo, nadie pararía. Al reventárseles el barzón, y convencido de que nunca tuvo “canicas para jugar“ en la contienda por la nominación del candidato del PRI a la gubernatura del estado de Colima 2015-2021, Kike, como el chorrito que había en la fuente, sintió pánico escénico y mejor de abstuvo de presentarse “personalmente en persona” ante los muy politizados manzanillenses que desde hace rato ya no dan un cacahuate por sus ex aliados de ocasión Nabor, Pico y Chucho, y que tomaron puntual nota del desaire que les hizo el muchacho villano.
Rojas Orozco y sus asesores de cabecera, entre ellos Christian Torres Ortiz Ocampo, saben y reconocen que ningún analista ni medio de comunicación serio lo considera aspirante a la gubernatura del estado, pero a pesar de ello pagan para que los vendedores de espejitos lo metan con calzador a la lista en la que sólo figuran, por orden alfabético, el ex gobernador interino, ex secretario general de gobierno y diputado federal, Arnoldo Ochoa González; el ex secretario de la SEFOME, ex alcalde de Colima y subsecretario de comunicaciones del Gobierno Federal, José Ignacio Peralta Sánchez; el ex dirigente municipal de PRI Colima, ex diputado local de mayoría relativa, ex secretario de educación pública y presiente municipal de Colima, Federico Rangel Lozano; y el ex alcalde de Manzanillo, ex diputado federal, ex senador de la República y todavía secretario general de gobierno, Rogelio Humberto Rueda Sánchez.
Convencido de que nada tenía que hacer en la pasarela política que en vísperas de elecciones son las tradicionales Fiestas de Mayo, Kike se abstuvo de asistir al demasiado austero recibimiento pagado por la administración a su cargo, sin importarle el desaire hecho a los manzanillenses cuyo respaldo no necesitará en virtud de haber ya bajado su mira hacia la diputación correspondiente al Primer Distrito Electoral Federal o una diputación local, replanteados objetivos nada fáciles de lograr en virtud de la descomposición de su primer equipo de “colaboradores” y la creciente inconformidad que en los ciudadanos de Villa de Álvarez está provocando su autoritario y patrimonialista desempeño actual.
Enrique Rojas Orozco, como miembro distinguido del PRI de Fernando Moreno Peña, para ser políticamente congruente, debe abrirse ya de capa y seguir la misma pauta de su compañero de establo Francisco Zepeda González, integrándose de lleno al proyecto que encabeza José Ignacio Peralta Sánchez, quien amenaza con gobernar a los colimenses el próximo sexenio con el apoyo de su amigo personal y enemigo del bolsillo de los mexicanos, Luis Videgaray y Caso. Con suerte, los seguirán Chucho y el hijo de Doña Nico.
EL ACABO
Primero, sus asesores político-electorales le recomendaron a José Ignacio Peralta Sánchez permanecer en la ciudad de México para no exponerse innecesariamente a la trilla en Colima donde nada tenía que hacer para posicionarse como candidato a la gubernatura del estado sexenio 2015-2021, pues estando bien con su amigo Luis Videgaray y Caso, la opinión de los colimenses salía sobrando; luego, ante la realidad de que aspirante que no es visto no es respaldado, le “sugirieron” tener una mayor presencia en el estado; incluso enviando, al por mayor y con el descaro de cargarlo al erario público, tarjetitas de felicitación por cualquier motivo como cumpleaños, día de la madre etc. finalmente, como no levanta en las preferencias electorales de la gente como esperaban, han planeado publicar una encuesta hecha a modo que lo ubica en la punta. No falla, quien va abajo siempre inicia la guerra de las encuestas electorales.
Primero, sus asesores político-electorales le recomendaron a José Ignacio Peralta Sánchez permanecer en la ciudad de México para no exponerse innecesariamente a la trilla en Colima donde nada tenía que hacer para posicionarse como candidato a la gubernatura del estado sexenio 2015-2021, pues estando bien con su amigo Luis Videgaray y Caso, la opinión de los colimenses salía sobrando; luego, ante la realidad de que aspirante que no es visto no es respaldado, le “sugirieron” tener una mayor presencia en el estado a través del envío de tarjetitas de felicitación, saludos, pésame,etc., y visitas domiciliarias a colonias populares, humildes vecindades y comunidades rurales, para acreditar sensibilidad social y sencillez, cualidades que siempre le han sido ajenas; finalmente, como no levanta en las preferencias electorales de la gente como esperaban, han planeado publicar una encuesta hecha a modo que lo ubica en la punta. No falla, quien va abajo siempre inicia la guerra de las encuestas electorales.