Y a pesar de que se han registrado hechos de sangre, nuestro estado sigue siendo el más seguro, debido en gran medida al apoyo que existe entre las corporaciones policiacas, pues era muy bien sabido de que había un divorcio entre las policías estatales y municipales, debido a los colores que vestían sus alcales. Lo bueno que eso ya es tiempo pasado.
Tener a Colima en ese sitio no es nada fácil, por ello, se ha visto que ya fueron adquiridas nuevos equipos de radi-comunicación, patrullas y armamento, además de que a diario existen cursos de capacitación para el personal que trabaja en esta delicada tarea.
El Consejo Estatal de Seguridad Pública, organismo presidido por el gobernador, ha sido un instrumento eficaz en la lucha contra las conductas antisociales, pues se sabe que luego de que una persona llamó al 066 señalando que había una balacera en un establecimiento de compra-venta de autos, en menos de 4 minutos ya estaba acordonada la zona y ello permitió la captura de uno de los implicados.
La puesta en marcha de la línea telefónica 089 para denuncias anónimas, ha permitido además la captura de gente dedicada al narcomenudeo, problema que se estaba convirtiendo en un dolor de cabeza para la policía, pero además, permitirá disminuir la violencia intrafamiliar, otro problema que se debe atacar.
Por lo anterior, que bueno que nuestro estado se ubique como el más seguro de la república mexicana, lo que trae tranquilidad a los ciudadanos, los sectores productivos y permite que gente del exterior lo mire con buenos ojos para invertir.