TONALTEPETL  

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Por: Gustavo L. Solórzano.

La soberbia es una enfermedad sumamente contagiosa, naturalmente quienes atienden un cargo por mínimo que sea, son los principales ejemplos, claro está, con honrosas excepciones. Sigo afirmando que nada es para siempre. Como el caso de “Margarita, Margarita, no te subas tan arriba que las hojas en el árbol no duran toda la vida”.

Descubierta por Hahnemann, (Médico alemán, 1796) la homeopatía trata las enfermedades con dosis infinitesimales de una sustancia que, al ser ingerida en grandes dosis por sujetos sanos, les produce un conjunto de signos y síntomas semejantes a los que presenta el enfermo. (Similia similibus curantur). Para ello, quienes la estudian, clasifican las enfermedades en agudas y crónicas. Su origen se basa en los tres reinos de la naturaleza y es un modelo médico clínico terapéutico que cuenta con más de 200 años de existencia.

El papel que juegan las emociones en las enfermedades, asignándoles un peso considerablemente mayor que el que se les da en el modelo occidental clásico. Con estos elementos se ha desarrollado todo un sistema complejo de atención a la salud. Hay fuertes evidencias que apuntan hacia explicaciones tanto desde el punto de vista biofísico con el concepto de la “memoria del agua”, como de fenómenos bioquímicos implicados en la acción farmacológica de los medicamentos homeopáticos.

El año de 1850, marca el inicio de su práctica en nuestro país, con el reconocimiento del presidente Benito Juárez García, siendo ejercida primero por médicos españoles y posteriormente por médicos mexicanos que la realizaban en forma privada.

El 23 de junio de 1893 los doctores Joaquín Segura y Pesado, Ignacio Fernández de Lara, Ignacio María Montaño y Fernando Gómez Suárez, solicitaron el apoyo oficial para establecer un Hospital en donde se atendieran enfermos con medicina homeopática. Manuel Romero Rubio, entonces ministro de Gobernación, intercedió ante el general Porfirio Díaz Presidente de México para la fundación del Hospital Homeopático el 15 de julio de 1893.

La Ley General de Salud en nuestro país, reconoce desde el 7 de mayo de 1997 la existencia de medicamentos alopáticos, homeopáticos y herbolarios (Articulo 224). Estando definido además, en el Reglamento de Insumos para la Salud.

Durante el periodo presidencial de Vicente Fox Quezada la homeopatía es reconocida a nivel licenciatura, para ser instruida en instituciones que no fueran de medicina general. Lo anterior, en respuesta a miles de ciudadanos, profesionistas en otras áreas y público en general, que estuviera interesado en la carrera humanista.

Paso a paso, la homeopatía se consolida como una medicina, sensible y adaptable a las necesidades de las personas y de los animales. Con un profundo respeto ante la emoción y el dolor, ante las necesidades más apremiantes del ser.

 

ABUELITAS:

A la gente nos gusta ser bien atendidos, recibir un trato cordial y respetuoso de cualquier prestador de servicio, eso nos lleva a recomendar favorablemente el lugar visitado. Caso contrario, cuando además de caro, está malo, como se dice de manera coloquial, pues no solamente no volvemos, sino que mal recomendamos el lugar visitado. Tenemos la libertad para escoger a que negocio acudir y solicitar un servicio. Lamentablemente cuando algún mal servidor público institucional, que no funcionario, incumple, es descortés, prepotente y en consecuencia traiciona la confianza de quien lo puso en determinado lugar, además de faltar a la población, pues mientras sus jefes no se den cuenta, la sociedad tendrá que aguantar, supongo. Es cuánto.