Sobreviviendo con dos mil pesos
Por: Yaret Ramos Vallett
¿Quién puede cubrir sus necesidades básicas con dos mil pesos al mes? Pues sí, aunque sea difícil de creer hay personas en México que eso reciben de pensión para pagar luz, teléfono, agua, predial, comestibles ¿y cómo le hacen para sobrevivir con ese dinero? Además la mayoría ya no tienen oportunidad de conseguir un trabajo estable con un salario digno.
Por ello, cada vez más, se ve a adultos mayores ejerciendo labores de cerillos o de “viene viene” en los centros comerciales, pues al no tener los recursos necesarios tienen que salir a buscarlo donde se pueda.
Los políticos han aprovechado esto para “crear soluciones” mediante programas de ayuda social como el de la Ciudad de México donde los adultos mayores de 68 años reciben mensualmente mil 75.20 pesos, aun cuando tengan algún ingreso de otra pensión, medidas populistas, desde mi punto de vista, que en algún momento ya no podrán sostenerse si no se cuenta con un verdadero sistema de pensiones.
Para ganar votos Enrique Peña Nieto, durante su campaña, prometió una pensión para todas las personas de la tercera edad a partir de los 65 años, en ese momento se dijo que iba a ser para todos, pero la realidad es otra, pues a esta “ayuda”, que consta de mil 160 pesos cada dos meses, es decir 580 pesos por mes, no pueden acceder las personas que ya reciban una pensión de hasta de mil 92 pesos mensuales, por otra instancia.
O sea que si una persona tiene una pensión mensual del IMSS de dos mil pesos, que siendo franca no alcanza ni para la comida de una quincena, no tiene la oportunidad de recibir la “ayuda” del gobierno federal, además tampoco tiene la oportunidad de obtener un trabajo estable con un sueldo seguro, entonces ¿De qué va a vivir esa persona?
El problema de las pensiones se ha agravado con el paso de los años y seguirá agravándose, si las instancias correspondientes no hacen algo al respecto, pues entre la expectativa de vida de los mexicanos que ya es mayor a 75 años, el aumento de personas que están por cumplir los 65 años y la falta de previsión de los ciudadanos para su retiro, se crea una bola de nieve difícil de detener, que puede causar una crisis financiera en pocos años.
Y es que para el año 2050, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), más de la cuarta parte de la población en México será vieja, es decir los que hoy tienen de 25 a 35 años serán adultos mayores y entonces habrá 13 mexicanos en edad de recibir una pensión por cada 10 jóvenes laboralmente activos, o dicho de otro modo, por cada pensionado, habrá sólo tres trabajadores activos.
Dirán los políticos y funcionarios de los diferentes niveles de gobierno “aún falta mucho para llegar a ese escenario”, pues tal vez, pero yo creo que es hora de que realmente se haga algo al respecto, no es posible que haya tanto adulto mayor apenas sobreviviendo con una ínfima pensión y que en ocasiones tengan que salir a las calles a pedir limosna.
¡Ah! Pero también está el otro escenario, ese donde algunos adultos en plenitud, como se les llamó en el sexenio de Vicente Fox, tienen hasta tres pensiones y reciben cantidades como si fueran altos ejecutivos, por ejemplo expresidentes de la República o ex rectores de universidades públicas, gastos que poco a poco van socavando las finanzas, tanto estatales como federales.
Este mes se celebra el día del abuelo, se hablará de estadísticas y de las “cosas buenas” que han hecho los gobiernos por sus viejitos, les darán despensas o suéteres, pero no les solucionarán el problema de su manutención.
¿Qué nos espera a los que vamos para allá? ¿Hasta cuándo se conformará un verdadero sistema de pensiones? ¿Quién tiene responsabilidad en esto? ¿Los hijos tienen que hacerse cargo? ¿Y si no tiene hijos, quién?
Twitter: @yanorava