¡NI LOS VEO NI LOS OIGO!
Por: Noé Guerra Pimentel
Frase popular que denota desdén, menosprecio, desaire y hasta desprecio y que dicha por el entonces presidente Carlos Salinas de Gortari se hiciera célebre luego de su último informe, en contra de la oposición de izquierda que lo abucheó en coro llamándolo ¡Cínico! ¡Prepotente! ¡Ladrón! ¡Hipócrita! ¡Déspota! ¡Traidor! ¡Corrupto! ¡Criminal! Entre otros epítetos que ahí recibió y que se multiplicarían desde dentro y de fuera contra el hasta entonces autoproclamado “Líder mundial”, como ya se veía él en el extranjero desde su posición de presidente de México antes de su espectacular caída, defenestración política y el repudio social que su nombre y simple recuerdo arrastrarían hasta nuestros días. El mensaje de Salinas fue claro: Las opiniones en contra de mis actos no tienen valor, yo soy el presidente. Las críticas de la sociedad no merecen ni mi atención ni mi respeto.
Reprobable y reprochada actitud la de Salinas que, como vemos, a dos décadas tal pareciera que ya hizo escuela y hasta permeó entre la clase política, incluso la criolla y del más bajo nivel y estatus, esa primeriza que por estar dónde está se da el lujo de hacer que no ve ni oye al pueblo, a sus representados, a sus gobernados, a quienes les debe el hueso, como tampoco a las instancias superiores, y peor ¡Ni a la ley! Que prometieron “cumplir y hacer cumplir”, o sea ¡Ni a su palabra! Cuando es lo único que al final valdría si la respetaran, como vergonzosamente se puede comprobar que no lo han hecho y que ni les importa hacerlo y para muestra algunos recientes botones que en competencia del Congreso local en su actual LVIII legislatura duermen el sueño de los justos con el beneplácito cómplice de todas las fracciones partidistas, seguramente atenidos a la corta memoria colectiva o a que algunos prescribirán y que cuando finalmente se resuelvan ya no habrá delito que perseguir y, por supuesto, ni pena que purgar, mucho menos delincuentes a quien escarmentar.
A manera de preguntas aquí un breve recuento ¿Qué ha sucedido con la sanción a los alcaldes panistas de Cuauhtémoc y Tecomán que por su ilegal intromisión en la elección extraordinaria para gobernador del Estado a favor del excandidato de su partido ordenó el TEPJF -http://colimanoticias.com/tepjf-determino-que-alcalde-de-tecoman-violo-la-normatividad-electoral/-? ¿Hasta cuándo será castigado –mínimo con el cese- el Director de Comunicación del Congreso del Estado por haber hecho proselitismo a favor del excandidato del PAN a la gubernatura, según ordenó el TEPJF -http://www.noticiasmvs.com/#!/noticias/diputados-de-colima-incurren-en-promocion-irregular-en-campana-electoral-tepjf-267-? ¿Qué ha ocurrido con la cacaraqueada auditoria y demanda penal que según hizo y propuso el Órgano Superior de Fiscalización Gubernamental OSAFIG por los dos últimos años de ejercicio sexenal de la anterior administración estatal contra Mario Anguiano (¿Por qué no los seis años?) -http://colimanoticias.com/investigara-osafig-cuentas-mario-anguiano-desvios-se-sancione-dice-mam/-?
¿En qué momento se dará de baja al ciudadano que por no reunir el perfil que exige la ley desde abril cobra como Auditor especial del OSAFIG -http://colimanoticias.com/es-ilegal-el-nombramiento-de-enrique-michel-como-auditor-de-osafig-diputados-del-pri/-? ¿Hasta cuándo el total de los 25 legisladores cumplirá con su 3 de 3 y transparentará su patrimonio y gastos completos -http://www.diariodecolima.com/opinion/35/2016-04-18-lunes-politico-? ¿Qué ha pasado con el verdadero juicio político que aun no se ha establecido en contra del exgobernador Mario Anguiano Moreno y sus probables beneficiarios señalados por presunto peculado -http://laextracolima.com.mx/index.php/2016/06/13/un-engano-el-juicio-mario/-? Y la más reciente ¿En qué momento, luego de tanta palabrería y galimatías con los que solo han intentado confundir, los diputados locales definirán la reasignación y transparencia de sus altos e injustificados emolumentos -http://www.diarioavanzada.com.mx/index.php/locales/18378-cuesta-mas-de-3-mdp-al-ano-cada-diputado-local-a-los-colimenses-imco-?
De todo y en varios casos cabría saber ¿Qué esperan estos, las y los diputados locales, para asumir su función real como la ley los obliga y la gente les demanda y qué espera la autoridad federal para solicitar el desafuero por desacato a la ley a quienes flagrantemente la están desobedeciendo y con ello burlando? ¿Qué tiene qué suceder para que cada quien haga lo que le corresponde conforme a la ley y a su propio compromiso social? ¿No ven a su alrededor o como Salinas “Ni ven ni oyen” para seguir actuando a espaldas y en contra de la gente? ¿Qué deberá pasar para que los de uno, del otro y de los otros partidos tomen conciencia y entiendan que la gente ya no aguanta más y que lo que sigue, si no hay efectivas respuestas, también tendrá sus consecuencias? Ya han pasado más de veinte años de que Salinas se fue, la pregunta ahora es ¿Ni los veo ni los oigo?