RIGO EN LIBERTAD
Por: J. Daniel Miranda Medrano*
Inexplicablemente uno de los hombres más ricos de Comala, el señor de los hostales y que al frente de la SEDESCOL provocara un incremento de la pobreza y pobreza extrema, salió libre luego de que el 32 Tribunal Unitario de Circuito no encontrara “elementos suficientes” para condenarlo. Sorprende la resolución después de que el Tribunal Electoral Federal decidiera anular la elección precisamente porque Rigoberto reconociera que sí era su voz la que apareció en un audio, lo que a la postre derivó en la decisión del Trife de anular la elección de gobernador y ordenar al INE que se encargara de la extraordinaria.
No sorprende la decisión en un país donde gente inocente acaba en prisión mientras delincuentes electorales y de otros tipos gozan de plena libertad. La decisión perjudica la credibilidad ciudadana en la tan llevada y traída “justicia” en nuestro país, apreciación ya de por sí muy desgastada en el imaginario de la sociedad actual. También pone en entredicha la justicia electoral y da un alarmante mensaje de impunidad para futuros actos de delincuencia que se pudieran suscitar en los comicios locales que se avecinan, pero sobre todo en el federal de 2017-2018.
No está de más recordar que Rigo fue el responsable de que el INE implementara toda la logística (afortunadamente profesional) y que la extraordinaria se convirtiera una guerra sucia entre acusaciones y dimes y diretes de todos contra todos. Por si no fuera poco, el costo de la elección culminó con la jornada electoral de enero, y tuvo un costo de más de 21 millones de pesos, contra los 40 mil que el ex secretario pago de fianza y que se le van a tener que devolver.
Si Rigoberto reconoció que sí era su voz la del audio que provocó la anulación ¿Dónde está la justicia?
CAMINO CORRECTO.- A seis meses de gestión del actual gobernador de estado, hay tareas pendientes en que trabajar arduamente, la principal es en el tema de seguridad que por cierto, no es único de Colima, pues recientes encuestas señalan que esta percepción es una generalidad en todo el país y se da en todos los estados independientemente del gobierno o partido en el poder.
La preocupación por este flagelo es de tal envergadura que el titular del Ejecutivo ya hizo el primer cambio significativo de su periodo al remover al secretario de seguridad por otro integrante de la Marina Armada de México. Algo más visible es que en este lapso de tiempo el desastre financiero empieza a recomponerse paulatinamente. Como economista, el mandatario ha sabido acomodar los números entre lo que se gasta y lo que ingresa a las arcas gubernamentales; el ahorro es significativo y ha tenido un costo político que no se debe dejar de lado; sin embargo, el camino empieza a enderezarse aunque aún falta mucho por hacer. Ello sin alardear premios y medallas comprados con el dinero de todos.
Twitter: @jdanie17