PRESENTAN A ALUMNOS UN AMPLIO ESTUDIO SOBRE EL USO DEL AGUA

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    En un auditorio compuesto en su mayoría por jóvenes estudiantes, la expositora refirió que como origen de su estudio está la vocación económica natural de la frontera norte que es la industria, situación que determina sus características geográficas, recursos naturales, una enorme zona semidesértica, cuya escasez de agua limita a algunas áreas y en otras imposibilita el desarrollo racional y ordenado de un diferente tipo de actividades productivas.

    “Junto con el notable incremento de población y la industrialización en la región se ha excedido la capacidad de la infraestructura existente, lo que ha incidido, entre otros aspectos, en un abasto insuficiente de agua para uso urbano, agrícola e industrial, además de que se hace un manejo inadecuado de aguas residuales”, puntualizó la conferencista.

    Dijo que todos esos son factores que en su conjunto impactan el medio ambiente y generan problemas de salud pública. Este trabajo, agregó, examina las diferentes formas en que se realiza la gestión de los servicios del agua de ciudades ubicadas en la frontera noreste de México y sur de Texas en tres ámbitos: la gestión local, la gestión financiera y la gestión de la calidad del agua.

    Un aspecto a considerar en este trabajo es la distinción de diferencias claras y especificas en la gestión de los servicios del agua entre México y los Estados Unidos, aseguró González Ávila, quien dijo que para esta investigación, se consideraron como unidades de análisis a tres pares de ciudades ubicadas en la frontera Noreste de México y sur de Texas: Ciudad Acuña, Coahuila; Nuevo Laredo y Reynosa, en Tamaulipas y sus correspondientes ciudades de EU, Del Río, Laredo y McAllen, en Texas. Se incluyen dos entidades fronterizas mexicanas (Coahuila y Tamaulipas) y tres gestiones municipales diferentes: Ciudad Acuña, Reynosa y Nuevo Laredo.

    Los objetivos de este estudio fueron comparar las formas de gestión local de los servicios del agua; analizar las diferentes formas de gestión relacionadas con la inversión en infraestructura del agua para uso urbano e identificar una serie de mejores prácticas de gestión existentes en las seis ciudades sujetas a la investigación.

    La investigadora añadió que para el análisis de la gestión local se consideraron aspectos como: autonomía de la gestión, profesionalización del servicio, transparencia y acceso a la información y mecanismos de participación ciudadana. “Se encontraron resultados disímiles entre las ciudades, lo que tiene que ver fundamentalmente con los diferentes marcos legales y con el uso político que se da al servicio en el caso mexicano. Estas diferencias se reflejan en relativamente mejores desempeños de las poblaciones estadounidenses cuando se comparan con la mexicanas”.

    Se puede afirmar, prosiguió, que los servicios del agua en Texas son financieramente más viables que en México. Dichos servicios, abundó, se caracterizan por varios factores, entre ellos una perspectiva de negocios que involucra una planeación financiera anual y la baja dependencia de financiamiento, gestión local y financiera del agua para uso urbano en la frontera noreste México-Estados Unidos. En contraste, las ciudades mexicanas dependen en alto grado de transferencias federales con respecto a la gestión de la calidad del agua.

    Como parte de este trabajo se analizaron las plantas potabilizadoras y tratadoras de aguas residuales de las seis ciudades, lo cual incluyó la observación de las condiciones de la infraestructura, el cumplimiento de la normatividad, y los niveles de profesionalización y capacitación del personal. También en este rubro se encontraron diferencias en las prácticas entre los dos grupos de ciudades.

    “El enfoque sobre la gestión local en la frontera nos permitió la comparación de ciudades que comparten las mismas fuentes de agua, con fuertes vínculos económicos y sociales pero cuyo contexto institucional es completamente diferente”, apuntó González Ávila.

    A manera de conclusión, la estudiosa dijo que el análisis permitió identificar prácticas de gestión del agua en diferentes ámbitos (administración pública, financiera y ambiental) que pueden conducir a mejorar la gestión del agua para uso urbano en la frontera.