OBRAS SON AMORES

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Vale más hacer y arrepentirse,

que no hacer y arrepentirse.

Nicolás Maquiavelo.

Por: Manuel Olvera Sánchez

De no ser por la infraestructura hospitalaria, educativa, de vivienda y vial, realizada durante la administración del ex Gobernador Fernando Moreno Peña, nuestro estado no ha sufrido obra alguna que trascienda por su importancia en mejorar la calidad de vida de los colimenses.

Gobiernos del estado han pasado sin pena ni gloria, se han dedicado a fines distintos para los cuales la sociedad los eligió, peor aún, con sus acciones han impedido generar las condiciones para lograr un desarrollo equilibrado que permitan inversión productiva en infraestructura y servicios.

Colima ha venido sufriendo durante los últimos tres sexenios de un cáncer llamado deuda pública, la cual viéndolo desde un enfoque familiar es el equivalente a vernos obligados a gastar en lo indispensable, sin realizar erogaciones mayores a nuestros ingresos, situación que en el sector gobierno salvo honrosas excepciones se visualiza bajo esa óptica.

Nuestro Colima, derivado de gobernantes no comprometidos con la sociedad mexicana, han expuesto de manera considerable el destino de las futuras generaciones, ya que al incrementarse la deuda las políticas públicas sociales enfocadas a disminuir la pobreza y pobreza extrema se ven afectadas financieramente hablando.

Vale recordar tan solo en diciembre pasado el gobierno del estado anunció la despedida de 600 trabajadores, situación que evidencia una visión equivocada del manejo del recurso público, ya que todo parece indicar que era personal que no era meramente indispensable para el correcto funcionamiento de la administración estatal, lo cual posicionó en estado de riesgo a la administración.

Durante estos últimos días hemos conocido de una nueva solicitud de crédito que el Gobernador del Estado José Ignacio Peralta Sánchez presentara al poder legislativo con la finalidad de atender, según lo dicho por él, temas relativos a la seguridad pública, salud y obra pública.

Lo malo del nuevo crédito que estará solicitando el Gobernador del Estado radica básicamente, y a lo señalado por una infinidad de actores políticos gira en el sentido que en otras ocasiones ya se le han autorizado líneas crediticias y muy en particular en el tema de salud sin los resultados esperados, ya que no es palpable la mejoría en ese rubro tan necesario en el cual se visualice que están comprometidos con las causas justas de la sociedad.

Los legisladores locales de nueva cuenta estarán bajo el escrutinio de la sociedad, dependiendo de la decisión que tomen se estará en condiciones de juzgar sobre a qué intereses obedecieron, si actuaron de manera omisa al desatender la visión de gobierno del Presidente de la República con relación a políticas públicas austeras o actuaron comprometiendo a las futuras generaciones al aprobar el crédito por 722 millones.

Claro que los créditos son buenos, quienes están en contra de ellos desconocen lo generoso que son, desconocen las múltiples ventajas que representa acceder a uno y más aún en momentos en los cuales surgen requerimientos que de manera inesperada se presentan, lo malo en el caso particular del estado radica básicamente en que la sociedad no ve resultados que dignifiquen su calidad de vida.

Vale recordar que los resultados en materia de seguridad publica y de salud que son básicamente los argumentos bajo los cuales el gobernador está solicitando el nuevo crédito son desastrosos y el abundar sobre ellos no seria suficiente este espacio, indudablemente se visualiza una situación compleja en materia política para el gobernador.

Otorgándole el beneficio de la duda al gobernador en el sentido de ser necesario de nueva cuenta un nuevo endeudamiento, existen infinidad de estrategias financieras mediante las cuales pudiera hacer frente a la presunta crisis económica bajo la cual se encuentran las finanzas estatales y basta con aplicar lo dictado en la Ley de Disciplina Financiera de las Entidades Federativas y los Municipios, una ley aprobada precisamente durante el mandato del ex presidente Enrique Peña Nieto.

Para nadie es desconocido que el Presidente de la Republica conoce a cabalidad el accionar del sistema político mexicano, su vida entera la ha desarrollado al interior del mismo, lo anterior se confirma al girar instrucciones a su Secretario de Hacienda Arturo Herrera señalándole que no se le otorgue ningún aval a los gobernadores que pretendan adquirir deuda o créditos.

La orden del presidente a su secretario de Hacienda Arturo Herrera se presenta precisamente en el momento en el que el gobernador esta por presentar su solicitud de endeudamiento al Congreso local, lo anterior es un mensaje claro a los legisladores de la 4t en el sentido de que sean congruentes y revelen si efectivamente comparten los dictados en materia de austeridad o simplemente obedecen a intereses personales actuando de manera omisa ante una sociedad que cada día se encuentra en condiciones que en nada dignifican su calidad de vida.

¡MÉXICO, HAZ MEMORIA!

La visión que tenías sobre mí, no la defraudare, eso me fortalece aún más, serás ese impulso para lograrlo.

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