Informes de la Policía Estatal Preventiva, la Policía Ministerial y el Ayuntamiento revelan que los turistas permanecían privados de su libertad y eran procedentes de Colima y San Luis Potosí, sin embargo, la Secretaría de Gobierno de Michoacán rechazó anoche que se tratara de turistas.
“De las ocho personas retenidas por los comuneros, todos ellos del sexo masculino, ninguno de ellos son turistas del Estado o que provengan de otra entidad, sino que se trata de hombres oriundos o vinculados a la región”, cita el comunicado sin dar nombres.
Sin embargo, entre los retenidos se ha identificado a Alfredo García Villaseñor, supuesto pariente de un funcionario judicial del Estado de Colima.
También permanecían privados de su libertad dos amigos de él, dos ingenieros y el guía de turistas que coordinaba el recorrido del grupo, de nombre Eufemio Monteverde Monteverde.
Algunas versiones aseguraban que entre las víctimas había un estadounidense, lo cual fue desmentido por funcionarios de la Secretaría de Gobierno del Estado.
“La información que tenemos es que se trata de una persona que estudia en los Estados Unidos, pero que es originaria de la región donde estalló el conflicto, no es extranjera”, explicó una fuente de esa dependencia, consultada por EL NORTE.
La retención se realizó desde las 14:00 horas del martes por habitantes de la comunidad de Angahuan, pero hasta ayer se dio la voz de alerta.
Dicha localidad es la puerta de acceso a la ruta turística del Paricutín, el volcán que hizo erupción el 20 de febrero de 1943, y a las ruinas de San Juan Parangaricutiro, donde destacan los muros de la iglesia que quedaron en pie pero rodeados de toneladas de roca volcánica.
Los informes de la Secretaría de Gobierno señalan que la retención de civiles se deriva de una medida de presión para que el Gobierno resuelva el conflicto de tierras entre Angahuan y Nuevo San Juan Parangaricutiro.
Además, los comuneros de Angahuan exigen la búsqueda y localización del ex jefe de tenencia de ese lugar, Jesús Galván, desaparecido hace dos semanas.
Antonio González, Alcalde de Uruapan, confirmó que las personas retenidas se encontraban de paseo, procedentes de Colima y San Luis Potosí.
Aparte de retener al grupo de turistas, los comuneros también bloquearon la Carretera Uruapan- Los Reyes y secuestraron algunos autobuses.
De acuerdo con los reportes oficiales, alrededor de 200 policías estatales fueron movilizados por la tarde de ayer hacia la zona del conflicto.
El convoy policiaco se concentró en un cuartel militar cercano, en el que al cierre de edición continuaban esperando la orden para intentar un posible rescate de los paseantes.
La situación en esa zona de la entidad era tensa, pues se temía un brote de violencia en caso de que los comuneros no aceptaran liberar a los turistas retenidos.
También arribó a la zona una comisión de funcionarios encabezados por Alfredo Amezcua, director de Concertación Agraria, y el subsecretario de Enlace Legislativo y Asuntos Registrales, David Garibay Tena.
Los funcionarios intentaban anoche negociar con los inconformes.