En el olvido prestadores de servicio de Pascuales tras los daños de ‘Nora’: Comisaria

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*Los ramaderos del lugar han tenido que hacer frente a la situación pese a que las necesidades más urgentes con la reparación de caminos y el alumbrado.

Luis Rosales Chávez|CN COLIMANOTICIAS 

Tecomán, Col.- Los prestadores de servicio de la playa de Boca de Pascuales se dicen olvidados de parte de las autoridades luego de que el huracán Nora causó severos daños a este destino turístico.

Rocío Olivera Contreras, comisaria de la playa de Boca de Pascuales, lamentó que hasta el momento no estén teniendo el apoyo que requieren para levantarse después del paso y los daños que dejó el huracán “Nora” en al menos el 80% de las enramadas.
Admitió que han sido los elementos del 88 Batallón de infantería y una máquina que envío el municipio, los que han acudido a apoyar a este lugar.

Los ramaderos del lugar han tenido que hacer frente a la situación pese a que las necesidades más urgentes con la reparación de caminos y el alumbrado.

Olivera Contreras señaló “los caminos están llenos de arena y una máquina del ayuntamiento no nos abastece, nos está apoyando el ejército con la recolección de ramas y basura, agradecerles al batallón 88 porque nunca nos habían apoyado y no sabíamos dónde tocar la puerta, yo les agradezco de todo corazón  su gran respaldo”.

Pascuales recibió de lleno el oleaje provocado por meteoro y salvo 20% de enramadas, todas las demás están severamente dañadas ya sea que se cayeran las palapas, techos, cocinas, baños o bien quedaron enterradas, así como varios tubos rotos. Sumado a estos daños, el servicio de alumbrado público y luz en las casas es malo porque se reventaron muchos cables, afirmó la comisaria.

“Del Estado no hemos tenido nada de apoyo, ni siquiera nos han venido a visitar, es más ni siquiera un kilo de sal, yo entiendo que la necesidad es para todos y que hay playas más dañadas que nosotros, pero quisiéramos ver a las personas que están en el puesto o que quisieron en algún momento el voto”. 

Aclaró que aunque el ayuntamiento les envió una máquina, dijo “pero no es suficiente, la máquina no sirve”. Debido a la necesidad, la Rocío Olivera se vio obligada a gestionar en el sector privado y a la vez pedir ayuda a quien desee brindarla”.