EL CRONISTA MUNICIPAL
Por: Noé Guerra
Así sin mayores ni innecesarios aspavientos, de manera sencilla pero emotiva, de manera breve este viernes 20 de mayo el honorable Ayuntamiento de Armería me tomó la protesta protocolaria como Cronista oficial de mi municipio natal, distinción que mucho me honra y que con toda humildad, así debo recordarlo, es la segunda ocasión que dicho título honorífico se me confiere, la primera fue hace quince años, por el H. Ayuntamiento 2001-2003, periodo aquel en el que además de significar las efemérides del municipio, impartir charlas y organizar eventos alusivos al rescate y preservación de los valores y motivos de identidad, también logré la edición de la Enciclopedia de los Municipios de México, capítulo Armería.
Para esta ocasión con el beneplácito del Honorable Cabildo, he propuesto un plan de trabajo que con el apoyo de las áreas administrativas, como es menester, paulatinamente iré desahogando, tal y como lo precisé en el acto, luego de haber rendido protesta, cuando afirmé que: honrar, honra y agradecer dignifica al ser humano. A la vez que agradecí al Cabildo por su confianza, apoyo y decisión, así como por su generosidad al reconocerme en una condición que por igual me honra como compromete y significa como responsabiliza; y por permitir adentrarme en el rescate de la memoria colectiva de Armería, de buscar hacer trascender los valores sociales y generar la salvaguarda de los motivos de identidad que unen e identifican como colimenses y distinguen como armeritenses a casi medio siglo de vida constitucional como municipalidad, la más joven del Estado Libre y soberano de Colima.
Igualmente apunté que como oportunamente fue de su conocimiento, en mi propuesta de plan de trabajo integrada por siete considerandos en los que se fundamentaba el acto que nos había convocado, se definen diecinueve acciones a realizar en mi condición de Cronista oficial durante los siguientes 28 meses y días que les restan como gobierno municipal, mismas en las que persiguen tres grandes propósitos: libertar, tutelar y transmitir lo que somos e históricamente hemos sido. Acciones en las que ofrecí empeñar mi esfuerzo para su cumplimiento, sumado al ejercicio municipalista que ellos encabezan y en el que bajo esa directriz habré de afanarme, consciente de que desde mi nominación, con su voto unánime, me brindaron su confianza, su solidaridad y apostaron su respaldo, en el entendido de que solo con su decidida participación todo se concretar, siempre anteponiendo el interés de Armería y de su gente.
Para concluir, porque nobleza obliga y es lo justo, aparte de ponderar con imparcialidad la voluntad de las y los integrantes del Cabildo, con el permiso de los mismos formulé otras gratitudes para mí especiales: a mis progenitores por el privilegio de haber nacido y dado mis primeros pasos en esa mi tierra amada, a mi padre José Guerra Arrezola (qepd) y a mi madre Fidelina Pimentel Rangel, igualmente a mi esposa Imelda A. Espinoza Scot y a nuestros hijos: Fabián, Frida y Paola; así como a mis exmaestros y excompañeros, amigos y eventuales alumnos y, con ellos, a todos cuantos han dado de sí para que llegara ahí.
También, aunque en otro apartado, por sus personales esfuerzos a quienes además de su interés y ánimo manifiesto fueron los voluntarios portadores de dicho pleno y órgano colegiado para que un servidor resultara primero invitado y persuadido, luego propuesto y discutido y, finalmente seleccionado y distinguido con este alto honor, que desde el viernes 20 de mayo, mucho me vuelve a honrar y moralmente me gratifica más al reconocérseme cual “profeta en mi tierra”.
En dicho tenor ofrecí mi institucional y plural agradecimiento al Regidor Omar Ernesto López Castillo, al Regidor Rafael Ochoa Ortiz, a la Regidora Anel Libett Martínez Zúñiga y al Presidente Ernesto Márquez Guerrero, pues gracias a sus buenos oficios nuevamente y por este periodo volveré a ser, como también se dice: el portavoz de mi patria chica, el vocero popular del municipio, el notario social de sus barrios, colonias y localidades, el heraldo histórico del Ayuntamiento, el Cronista oficial del municipio de Armería. Que sea para bien de mi tierra, que sea lo mejor para su gente.