PANISTAS. AHORA CORDERISTAS Y MADERISTAS
Por: J. Daniel Miranda Medrano
Risible, pero respetable (o respetable pero risible) el anuncio de varios panistas locales de apoyar a Ernesto Cordero y Juan Manuel Oliva para la dirigencia nacional del PAN, muchos de los bolillos locales entre los cuales se encuentran algunos muertos vivientes, apoyan al delfín de Calderón y anunciaron su apoyo al par de perdedores (y mentirosos hubiera dicho el Chayo).
El coordinador regional de la alianza “Cordero-Oliva” resultó ser el fiasco de Raymundo González Saldaña, quien no pudo imponer a Salvador Fuentes a la mala. González Saldaña informó que Colima entregó ya 730 firmas, que se suman a las 22 mil 500 necesarias para el registro de la candidatura, pero en los próximos días se recabarán más. Ahí la lleva Raymundo, después de que él mismo anunció en enero de 2013 que al padrón de militantes panistas en Colima sufrió una baja de alrededor de 90 por ciento. Las supuestas 730 firmas han de ser de todos los panistas que quedaron en el padrón real después de la desbandada.
Los zombies señalados, como buenos calderonistas, están más preocupados por apoyar la aspiración de Mr. Bean, que en arreglar el desastre en que se encuentra una candidatura que de antemano ya se ve perdida. Madero dejó la dirigencia temporal del PAN porque sabe que tiene todas las ventajas sobre el títere de Felipe, y porque implícitamente la “neutralidad” de Josefina le favorece. Y si eso no fuera poco tiene el apoyo de Los Pinos, que apuestan a la permanencia de Madero porque con él ya se entienden, situación que sería a la inversa con Cordero.
En todo este aquelarre el jefe de todos los senadores del PAN, el coquimatlense Jorge Luís Preciado, ya dijo que el desgobierno de calderón hizo el ridículo con la supuesta muerte de “El Chayo” y que eso demostraba la falta de pericia y de órganos de inteligencia. Si me apuran tantito ese fue otro teatro más de “García Luna Productions”.
Y del otro bando, Pedro Peralta, también dijo que la pifia de Calderón respecto a la no muerte del Chayo, fue una mentira más y que con vergüenza se debía de aceptar porque le quedaron mal al pueblo. También dijo Peralta que el PAN tiene un cáncer que a nivel nacional se llama Ernesto Cordero y a nivel local Raymundo Saldaña. Bueno estimado lector, ya sabe usted que pasa con estos males, o los extirpan o terminan por matar al portador.
Así, los panuchos colimenses no se salvan de sí mismos aquí, se tiran a matar pero orgullosamente el grupo de los muertos vivientes ya quieren salvar al PAN nacional. No llegan a ser candiles de la calle y oscuridad en su casa porque tampoco les alcanza para eso.
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