Análisis Político
Por Abel González Sánchez
Pareciera que se perdió el interés del gobierno estatal y federal en el último año para acreditar su labor en la seguridad pública en la entidad, no hay evidencia clara de nada, es la realidad, antes había operativos, rondines en las calles o en las localidades tanto de la policía estatal conjuntamente con los militares y marinos, ojalá la nueva administración estatal fortalezca a la Secretaría de Seguridad Pública, desconocemos el plan propuesto para fusionarla con la Secretaría General como se dio a conocer, ya que piensan los especialistas que si se fusiona se burocratizaría como antes y las decisiones serían otra vez políticas, no policiales, aunque lógico, no creemos que estemos peor como ahora, ya que no vemos a que se dedica el gabinete estatal de seguridad.
Lo que ha faltado en Colima es que se designe a un buen Secretario de Seguridad Pública pero colimense, con carrera policial, los recomendados de otras entidades no tienen el mismo amor e interés por lo que les ocurra a los colimenses, pues hemos visto que nunca han nombrado desde se creó como Secretaría a un nacido aquí como titular, y sabemos que sí tenemos colimenses con perfiles adecuados, honestos, con formación policial y militar especializados en otros países, pero los titulares los marginan para que no compitan con ellos. Ojalá en la nueva administración estatal no ocurra lo mismo, que metan mano desde el centro del país, para poner al nuevo titular como es costumbre para supuestamente tener apoyo de los militares o navales, cuando en realidad es una obligación constitucional, pero han llegado algunos hasta con problemas mentales, amenazando con pistola a sus mandos inferiores, aunque de bravos no tenían nada, porque nunca sacaron la cabeza de las oficinas, y menos salían a la calle a buscar delincuentes.
LA CEDH ALERTA SOBRE FEMINICIDIOS Roberto Ramírez como titular de la Comisión Estatal de Derechos Humanos del Estado en Colima, emitió ésta semana una alerta institucional para que los tres órdenes de gobierno estatal, municipal y federal se concienticen más sobre la grave problemática que se agudiza en Colima sobre los feminicidios, la alerta es también a nuestra sociedad y todas las familias para que ahora sí se preocupen y se ocupen más por su seguridad familiar y personal, pues los feminicidios van a la alza, y las desapariciones de personas también, van en aumento.
DESAPARECIDOS La Red Desaparecidos en Colima, A, C. ya advirtió hace poco que Colima registró hasta agosto de 2020 un total de mil 238 personas desaparecidas y una tasa de 157.7 casos por cada 100 mil habitantes, la segunda más elevada en ese tipo de delitos a nivel nacional, de acuerdo con datos del Registro Nacional de Personas Desaparecidas, procesados por México Evalúa, que el disparo de las desapariciones en la entidad es otro capítulo de la crisis de inseguridad pública en Colima, que desde 2016 hasta hoy se ubican los mayores niveles proporcionales de violencia homicida en todo el país, y Colima no es la excepción.
INSEGURIDAD EN LA TRANSICIÓN DEL PODER Ya empezaron algunas reuniones de empresarios locales tanto de Colima, Tecomán, como en Manzanillo a tocar el tema sobre el clima de tensión colimense e incertidumbre que hay cada vez mayor por los hechos recientes de desapariciones y feminicidios pero también de robos a negocios y casas habitación, consideran que ocurren por distender o aflojar el paso en la seguridad pública estatal por las elecciones y por el momento que se vive hoy en la transición del poder político estatal, ya que actualmente se observa que no hay presencia real de la guardia nacional ni de los militares de la defensa nacional ni los miembros de la marina, no hacen rondines en los municipios como se hacían antes, no se ven por ningún lado, menos los policías estatales que según la rumorología ya son muy pocos cuidando las calles en la entidad, lo que posiblemente coincide con el aumento gradual en la inseguridad, y estamos peor con los ayuntamientos, son muy pocos los elementos en las policías municipales y no están bien armados ni tienen unidades equipadas.
Colima era uno de los estados más seguros del país, pero ahora recientemente ocupo el segundo lugar nacional en incidencia de desapariciones forzadas por cada 100 mil habitantes, con 157.7 casos, casi tres veces más a la media nacional, que es de 57.7, según datos de la misma Secretaría de Gobernación. Colima ocupó en 2020 el segundo lugar mientras Tamaulipas encabezó el primer lugar por la altísima violencia que se tiene en esa entidad.
Lo cierto es que no hay evidencia de presencia de las instituciones de seguridad de los tres niveles, no creemos que estén encerrados por la pandemia, pues ya no vemos los rondines de vigilancia mixta de militares y de la guardia nacional conjuntamente con la policía estatal y municipal como lo señalamos, pues no hay nada en ninguna parte, ni en ningún municipio, como decía el padre Abel en Armería, “hijos míos, de verdad estamos jodidos”.