Diario de Yucatán
Veracruz.- “Lo único que no perdí en ningún momento fue a Dios…”, dijo la veracruzana Ángel de María Soto Zárate esta mañana en rueda de prensa en la catedral de Xalapa, luego de que la joven maestra fue liberada tras ser acusada de transportar una maleta con 10 kilogramos de cocaína.
La joven de 23 años abandonó ayer el penal de Nayarit a donde fue trasladada luego de ser detenida en el aeropuerto de la ciudad de México acusada de trasladar la droga, procedente de Perú. La mujer viajaría a Brasil para asistir a la Jornada Mundial de la Juventud que comenzará el lunes presidida por el Papa Francisco.
La mujer relató a las decenas de periodistas ahí reunidos que tras extraviar el pasaporte en Lima decidió regresar a México. Destacó en todo momento que conocer al Papa y a jóvenes con intereses comunes había sido el sueño que la motivó durante el último año.
El movimiento #LiberÁDMe
Ángel de María admite que aunque sabía que la comunidad apostólica a la que pertenece, Incienso de Dios, no la desampararía; nunca imaginó que se convirtiera en un movimiento tan difundido a través de las redes sociales y con apoyo de personas en otros países. “Es un milagro divino a través de las redes sociales”, afirmó. Los jóvenes con letreros del movimiento #LiberÁDMe la acompañaron durante la conferencia.
La joven dijo que, a pesar de que perdió su sueño, “nunca perdió la paz, ni la tranquilidad” y aprovechó para conocer la realidad de las reclusas del Cefereso. “Parecía trabajadora social encubierta… en lugar de preocuparme por mí, me preocupaba por ellas”, dijo.
La maestra ya no irá a Brasil: “Yo quería ir ahí a encontrarme con Dios y Dios vino a mi encuentro en el lugar que menos imaginaba”