LA EFÍMERA VISITA DE ALITO

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AL DESNUDO

Por: Édgar Rodríguez H.

La reciente visita del líder nacional del PRI, Alejandro Moreno “Alito”, a Colima en el marco del Día Internacional de la Mujer, deja muy poco o nada para reflexionar, pero si confirma por qué el PRI está en donde se encuentra ahora, casi moribundo después de cumplir 91 años el pasado 4 de marzo. Se nota como la edad que tiene, como un partido viejo que hoy no es ni la sombra del partido poderoso que fue.

El discurso emitido por “Alito” también confirma que el partido que encabeza está en terapia intensiva, tratando por todos los medios de sobrevivir con lo poco que le queda de capital político. La dirigencia del PRI estatal con Enrique Rojas al frente es un claro reflejo de ello, políticos que representan la misma historia, que viven de recuerdos y que nos les resta más que hablar de la coyuntura que les tocó vivir en otros tiempos, como si con ello pretendieran  convencer de regresar a los que ya perdieron.

Hoy los priistas con códigos, principios y valores que les fueron trasmitidos de generación en generación, son muy pocos, porque muchos decidieron emigrar a otro partido cuando se percataron que el barco se hundía. También las pugnas internas terminaron por herir al gigante que a pesar de los años no entendió que gestaba su destrucción.

Después de perder la Presidencia de la República con el panista Vicente Fox y luego con Felipe Calderón, el PRI tuvo suficiente tiempo de corregir errores importantes, no lo hizo pero el triunfo que consigue con Enrique Peña Nieto para recuperar la Presidencia, al menos eso hizo pensar.

Sin embargo, ya durante la administración peñista, las cosas fueron distintas y no precisamente para bien sino para acabar con la confianza no sólo de las estructuras priistas sino con la de toda la gente que esperaba encontrarse con un presidente priista renovado dispuesto acabar con la corrupción e impunidad, pero sucedió todo lo contrario, el caso el de la Casa Blanca fue sólo una muestra de ello.

El PRI y sus políticos se desentendieron de la sociedad, privilegiando la soberbia y el nepotismo, su sello fueron los excesos y la insensibilidad, en lugar de los principios y los valores. A Enrique Peña Nieto, no se le puede señalar como el hacedor o causante de la debacle del PRI, pero si como el autor del golpe mortal al partido, que culminó con la derrota de su candidato frente al de Morena, Andrés Manuel López Obrador.

Hoy de cara a los procesos electorales de 2021, al PRI no se le ven signos de sobrevivencia. La efímera visita de “Alito” a la tierra de sol y palmeras pasó prácticamente desapercibida. Todo quedó en un simple acto protocolario en donde el líder de los tricolores en el marco del Día Internacional de la Mujer basó su discurso en algo que todos saben pero no se hace dada concreto para combatirlo. Señaló que “cuando diez mujeres son asesinadas diariamente en nuestro país y de estos feminicidios nueve quedan en la impunidad, es evidente que el estado mexicano, solo tiene asuntos que resolver y de ninguna manera nada por celebrar con todo lo relativo a las mujeres”.

En el evento en el que estuvo Acompañado por el gobernador del estado, José Ignacio Peralta Sánchez, así como por la dirigencia estatal del PRI que encabezan, Kike Rojas Orozco,  Alito reconoce que “estas cifras también es la muestra fehaciente del fracaso total del Estado mexicano e incluyó en ese fracaso a las políticas públicas, a los mecanismos de prevención de las autoridades, de las oposiciones y también de los partidos políticos, de los entes públicos, privados, empresariales y gubernamentales, pero no habla de una propuesta concreta para revertir el grave problema que hoy enfrentan las mujeres al ser violentadas.

Al destacar en su mensaje que Colima siempre ha sido pionero en materia de impulso político a las mujeres, “pues es el primer estado con una diputada local y con una gobernadora y por ello el PRI siempre ha estado a la vanguardia de los derechos políticos de las mujeres, pues fue el partido que primero impulsó el voto femenino y ahora la paridad en los congresos”, Alito olvidó decir que eso fue hace mucho tiempo, cuando el PRI parecía no envejecer ni lo caracterizaba la soberbia y la corrupción.

Se dice que…

*Mientras el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno Alito, destacaba en una reunión con priistas que “Nacho Peralta es un gobernador de las mujeres, que ganó con las mujeres y que sin duda alguna su compromiso está con las mujeres”, nunca previó que horas más tarde durante su marcha y su manifestación, las mujeres de Colima quemarían un muñeco con la cara del gobernador Peralta Sánchez en señal de protesta por el gran número de feminicidios que se cometen en el estado.