AL DESNUDO

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SEGURIDAD: ASIGNATURA PENDIENTE

Por: ÉDGAR RODRÍGUEZ H.

A punto de concluir el año, la inseguridad que padece el estado será uno de los temas aún sin resolver por el actual gobierno. Los esfuerzo para combatirla se han visto superada por el flagelo que no sólo vive la entidad, sino todo el país en donde la delincuencia organizada se disputa las zonas para traficar enervantes. Colima, por contar con un puerto tan importante como el de Manzanillo, se ha colocado como uno de los preferidos de las mafias que decididas están a no dejarse arrebatar  o apoderarse de tan importe zona, lo que ha provocado permanentes enfrentamientos y muertes colocando al Estado en el primer lugar en homicidios dolosos.

Ante la situación que vive el estado en materia de seguridad, no resta más unir esfuerzos, todos; gobierno federal, estatal y municipales deben unificar estrategias para hacer frente a la delincuencia organizada, a la a quien por cierto, ahora le ha dado por atacar a policías, y cuando esto sucede es simplemente porque están viendo afectados sus intereses con la acción de la justicia.

Para hacer frente a la problemática, se debe actuar asumiendo cada quien su responsabilidad social y vigilar que las instancias públicas asuman la suya. Para ello es necesario ir a la raíz de los graves males que aquejan a la sociedad y que nadie ha querido ver por conveniencia política, sobre todo aquellos que son de un color distinto al del mandatario estatal, principalmente del Partido Acción Nacional.

Los gobiernos municipales han tratado de evadir su tarea en materia de seguridad responsabilizando al gobierno estatal, se les olvida que también es su deber para evitar el incremento de robos a casa habitación o vehículos, entre otros delitos.

Acierta el coordinador de la bancada priista en el Congreso Estatal Federico Rangel Lozano al señalar que no sólo bastan los esfuerzos  estatales y coordinador con el gobierno federal en materia de seguridad pública, sino existe un trabajo coordinado y un verdadero compromiso de las autoridades municipales, quienes en su mayoría son de extracción panista. Derivado de esto, el diputado tricolor anunció que su grupo parlamentario presentará un acuerdo legislativo al Pleno, mediante el cual propondrá que acudan los 10 directores de seguridad pública municipales a una reunión de trabajo.

La reunión que plantea el diputado, debe ir más allá de los reclamos como ha venido sucediendo en reuniones pasadas con el Secretario de Seguridad Pública y el encargado de la Procuraduría de Justicia del Estado. En lugar de esto, como dijo Rangel Lozano, es asumir compromisos, y que también reitere el respaldo a la población, que como representantes populares tienen ante un tema tan sensible como la seguridad pública.

Los alcaldes, del color al que pertenezcan, deben entender que cuando se dice que la seguridad de la población es una tarea de Estado, involucra a los tres órdenes de gobierno (Federal, Estatal y Municipal) y el objetivo central es liberar a los ciudadanos del miedo a ser agredido o despojado de un bien.

Es innegable señalar que el gobernador Ignacio Peralta ha trabajado para recuperar la seguridad de los colimenses y que aún se requiere mucho por hacer, pero para alcanzar el objetivo, se necesita de todos. El coordinador parlamentario del PRI reconoce que “la percepción ciudadana es que la violencia prosigue en Colima, pese a que hay indicadores que señalan la disminución de algunos hechos delictivos, pero no es suficiente para que cambie la visión de la ciudadanía”.

Se dice que…

*Durante el gobierno de Mario Anguiano Moreno, el autor de esta columna advirtió que El monto de los pasivos de corto, mediano y largo plazo del gobierno del estado y de las diez administraciones municipales, no es un dato claro, preciso, duro, sino todo lo contrario. Tampoco los plazos de vencimiento, las condiciones de los créditos contratados y los intereses pactados son informados con veracidad a los ciudadanos de cuyos bolsillos sale el dinero para cubrirlos. En el tema de la deuda de ambos niveles de gobierno cada titular maneja cifras a conveniencia magnificando las heredadas de gobiernos anteriores y minimizando lo contratado por quienes van de salida.

*Aduciendo liquidez financiera durante su gobierno, Mario Anguiano Moreno se la llevó solicitando créditos que nunca pudo pagar en tiempo y forma. Los últimos 638 de pesos que contrató con el Banco Interacciones el 21 de agosto de 2015, son prueba de ello.