A 96 años del Hundimiento del Titanic, Sigue la Polémica

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    La fría mañana del 10 de abril de 1912 no era un día más, ya que el majestuoso transatlántico Titanic, apodado por sus creadores como ” El Insumergible”, se aprestaba a zarpar del puerto inglés de Southampton, con 2.224 pasajeros, bajo el mando del veterano capitán Edward John Smith.

    Respecto a la tragedia del Titanic, cabe señalar una analogía a modo de negro presagio: 14 años antes que navegara el Titanic, se editó en Londres un libro de ficción llamado “Fatility de Morgan Robertson”, que describía a un barco llamado Titán que se creía inhundible.

    Dicho barco, ocupado por gente de dinero, en una noche de luna llena y cuando navegaba por aguas tranquilas, chocó con algo parecido a un iceberg y se hundió en una noche de abril, además tenía casi el mismo peso, longitud y capacidad de pasajeros.

    De regreso al Titanic, su capitán, uno de los más experimentados de la White Star Line, había dicho el día de la partida: “Este va a ser mi último mando, antes de jubilarme, porque deseo estar más tiempo con mi esposa y mi hija”.

    Así, bajo los estridentes sonidos que partían de una banda militar el Titanic partió del puerto inglés rumbo a su oscuro designio.

    La primera clase, segunda clase y tercera clase, en total 2.224 pasajeros, disfrutaron durante tres días de un hermoso palacio flotante conformado por lujosos comedores, natatorio interior, bibliotecas, gimnasio, alumbrado a toda hora y baños turcos al estilo romano.

    Hasta que llegó el fatídico 14 de abril. En la cabina de radio, los radiotelegrafistas empezaron a recibir avisos de peligro de grandes icebergs (trozos de hielo), los cuales fueron ignorados o no tomados muy en cuenta por la oficialidad.

    Poco antes de la medianoche del 14 de abril, con una noche estrellada, un mar tranquilo, los vigías dieron alarma de un iceberg al frente, a 600 metros de la proa.

    El primer oficial Murdoch, de guardia en el puente, intentó vanamente evitar la colisión, primeramente girando el timón (muy pequeño para la longitud del navío) a todo a babor, seguidamente dando marcha atrás, lo cual fue fatal pues el timón perdió presión de virada.

    Mientras eso sucedía, el capitán Smith se hallaba dormitando en su camarote. Los registros de la época cuentan que el barco en el último minuto logró evitar el choque frontal, pero no logró evitar que un costado sumergido del iceberg rasgara literalmente el casco como si fuera una tela.

    El iceberg era mucho más alto que el Titanic y siguió su camino. Luego, se desencadenó la tragedia, cinco de sus compartimentos estancos delanteros de estribor se combaron hacia adentro, saltando los remaches e inundándose. Al principio el daño no pareció fatal, sin embargo su diseñador Thomas Andrews, después de repasar el barco con el carpintero Huchtkins, predijo lo increíble, el hundimiento del Titanic no iba a demorar más de dos horas. El capitán y la oficialidad no salían de su asombro.

    Smith, con la premura del caso, instruyó a sus oficiales para el abandono en forma normal del barco evitando causar el pánico entre los pasajeros, a sabiendas, de que muchos de ellos morirían por el escaso número de botes.

    De ahí en adelante Smith, a pesar de su vasta experiencia, se mostró errático y ajeno a la situación y en su actuar.

    Sólo se pudieron embarcar 750 personas de un total de 1.100 cupos que debieran haberse llenado por bote, dándosele preferencia a la primera y segunda clase, mujeres y niños principalmente. El 50% de la tercera clase pereció.

    La noche del 15 de abril el Titanic tuvo el triste récord de haber radiado el primer S.O.S de la historia a las 0:10 de la noche. A las 0:30 la proa estaba ya sumergida, a la 1:45 alcanzaba la cubierta de botes.

    Luego se desató el caos y la confusión generalizada, entre los que quedaban; donde abundaron disparos de armas de fuego. A las 2:20 del día 15 el “Insumergible” se hundía, partido en dos como una cáscara de nuez, en las profundidades del océano, quedaron nadando en el agua unas 1.000 personas que murieron de frío (hipotermia) en menos de 30 minutos.

    Otro buque, el Californian, que estaba a menos de 20 millas del lugar, no oyó las señales de socorro emitidas por el Titanic porque no había nadie de guardia en la cabina de radio, aunque el vigía de cubierta vio los cohetes blancos del Titanic.

    A la llamada del S.O.S. solo respondió un navío, acudiendo al cabo de 1 hora y media. Este era el Carpathia, al mando del capitán Rostrom, que estaba a más de 50 millas de distancia, y que logró evitar la muerte de más personas en las frías aguas.

    En 1985, el investigador Robert Ballard y su equipo ubicaron los restos sumergidos del Titanic provocando gran expectativa mundial. El Titanic estaba en dos partes, lo que corrobora la versión dada en 1912.

    Una de las razones de porqué el Titanic se habría rajado a lo largo de la banda derecha es que el acero con demasiada contaminación de azufre con el frío se condensa y pierde fuerza dejándolo más vulnerable.