13 de septiembre: Niños Héroes

0

Sociedad de la información

Por: Alfonso Polanco Terríquez

En la semana viviremos un fragmento de la historia de nuestro país forjada en el calor de la historia de bronce, la épica del 13 de Septiembre o la batalla en el Castillo de Chapultepec, donde en su defensa perdieran la vida, lo que denominamos en la actualidad como Niños Héroes.

¿Mito o realidad? Pregunta que surge a partir de escritos aparecidos a medida que la Historia de los Annales avanza. En este espacio compartimos la posición de Noé Guerra -cronista e historiador colimense-, quien a través de una entrevista radiofónica hace un repaso de algunos mitos patrios, donde dejó en claro que los héroes de Chapultepec, no eran ni niños, ni héroes, tal como se ha sustentado.

En una ceremonia cívica del mes de septiembre es prácticamente difícil obviar esta narrativa de la historia de México -la Batalla de Chapultepec, acontecida el 13 de septiembre de 1847-, y en la cual según el relato oficial a través de los libros de historia, seis niños cadetes arriesgaron su vida para defender a nuestro país de las tropas estadounidenses.

Noé Guerra, precisa que los llamados Niños Héroes tuvieron poco de niños y mucho menos de héroes, de lo primero expone porque su edad oscilaba entre los 14 y 24 años. Aclara que es un engaño el que solo se consideren sólo a seis, ya que según información que tiene documentada, ese día pelearon en el Castillo de Chapultepec más de 50 cadetes, inclusive, agrega que en esta defensa se omite el nombre de Miguel Miramón, quien fuera Presidente de México, por razones obvias.

El cronista subraya sus razones porque no aparece Miramón, comenta que están vinculadas a que fuera fusilado como traidor junto con Manuel Mejía y Maximiliano de Hambsburgo en el Cerro de las Campanas en Querétaro en 1867, veinte años después de haber defendido la patria en aquella batalla en defensa del Castillo de Chapultepec.

Noé explica que esta anécdota de los niños según información que él tiene proviene de un soldado estadounidense que escribió en su momento un texto: “los soldados mayores de edad hubieran hecho bien siguiendo el ejemplo de los jóvenes”, y de ahí vienen los comentarios de que eran niños”.

Agrega que en realidad lo que sucedió fue que quienes tenían que haber hecho la defensa nacional no estaban en sus puestos, se quedaron los que no tenían a donde ir. En la entrevista el historiador narra la manera como perdieron la vida cada uno de los soldados, por citar: Fernando Montes de Oca, de 18 años, falleció en esa batalla, cuando un soldado estadounidense logró entrar por una ventana que se encontraba a sus espaldas y le disparará con una bayoneta.

De Francisco Márquez, de 14 años, detalla el historiador que era el cadete más joven de la tropa, explica que murió cuando le pidieron rendirse, haciendo caso omiso mata a uno de sus captores, por lo que fue acribillado por los contrarios. De Juan de la Barrera, de 19 años, explicó que murió durante la defensa, mientras se ubicaba al sur del cerro. Sobre Vicente Suárez, precisó que tenía aproximadamente 20 años y cayó en su puesto de centinela, en una de las escaleras del castillo.

Sobre Juan Escutia, el historiador afirmó que tenía alrededor de 20 años, que en realidad no era cadete, sino un soldado del Batallón de San Blas y no se arrojó con la bandera. Explicó que su nombre real era Juan Bautista Pascasio Escutia y Martínez. Este cadete pereció en la ladera poniente del cerro donde se ubicaba como tirador, siendo herido y cayendo al acantilado.

Noé Guerra comenta que hay probabilidades que durante la caída se pudo haber envuelto con la bandera del colegio, pero que en la realidad él muere abajo y no envuelto en ninguna bandera, tal como se presenta en algunos textos. De Agustín Melgar, de l8 años, precisa el historiador que fue un teniente que resultó herido durante la batalla en una lucha cuerpo a cuerpo y al no poder recuperarse de las heridas, murió un día después. Usted lector decide ¿Mito o realidad?