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México.- Las donaciones que se realizan en México, no son suficientes para atender la demanda. Esto preocupa al sistema de salud nacional, pues cada año hay más de 4 millones de personas que no reciben sangre. Algunos de ellos podrían estar en riesgo de muerte por esta causa.
“Se estima que alrededor de 5 millones de unidades de sangre se requieren para dar frente a los requerimientos de sangre del país y solamente el año pasado tuvimos 1.4 millones de sangre, es decir que nos quedamos 4.6 millones por debajo de las cifras que se requieren para dar frente a las patologías a nivel nacional, esto quiere decir que en algún hospital hubo gente que falleció porque no hubo sangre”, dijo el doctor Rei Franco Vargas, jefe de Banco de Sangre del Instituto Nacional de Perinatología (INPer).
Se calcula que nueve de cada diez personas, requerirán al menos una transfusión durante su vida porque tuvieron algún accidente grave, o padecen enfermedades crónicas como cáncer, leucemia, insuficiencia renal o anemia.
Cada año, las transfusiones y los productos sanguíneos contribuyen a salvar y aumentar la esperanza y calidad de vida de millones de personas ya que por cada donación, se puede beneficiar a por lo menos tres pacientes.
Además, se ha demostrado que donar sangre también tiene otros beneficios para el propio donante. “La médula ósea se estimula para una producción adecuada de las células porque de ahí se producen, hay también disminución de los eventos de infarto agudo al miocardio, y hay también una modificación o un equilibrio entre el hierro que nosotros consumimos y el hierro que nosotros estamos acumulando”, reiteró Franco Vargas.
Sin embargo, solo el 3.5% de las donaciones que se reciben, son de carácter altruista. El resto proviene de familiares de pacientes internados y en tratamientos.
“En este laboratorio del Instituto Nacional de Perinatología, se procesan alrededor de 25 muestras de sangre al día, de candidatos a donación, con la finalidad de detectar algún riesgo”.
La población que alimenta los bancos de sangre en nuestro país, generalmente tiene entre 30 y 40 años, pues la sangre de los más jóvenes no está pasando los filtros que se solicitan para ser donadores.
“La gente joven generalmente es rechazada por algunas prácticas de riesgo como son: prácticas sexuales sin protección, el uso de drogas, o hacerse tatuajes o perforaciones”, concluyó el Jefe de Banco de Sangre del INPer.
Con el lema “La sangre nos conecta a todos”, este 14 de junio se conmemora el Día Mundial del Donante de Sangre. El objetivo, agradecer y fomentar esta práctica que más que sangre, dona vida.
Fuente: NOTICIEROS TELEVISA