¿Habrá festejos de Año Nuevo? ¿Habrá navidad?
Por Alfonso Polanco Terríquez
Claro, como cada año, y tal como sucedió en nochebuena, muchos en Colima festejaron y festejaran no tendrán el más minimo remordimiento en hacerlo, se embriagarán de nuevo, se reunirán con adultos mayores con más de veinte personas, pese a saber que ya un contingente de colimenses de médicos y enfermeras que partió al centro de país para apoyar a diversos hospitales que están colapsando ante el aumento de infectados por coronavirus.
En otros hogares, tal como sucedió en nochebuena, no habrá nada, producto de que perdieron el trabajo durante la pandemia, otros los ingresos no se los permite, pero hay también quienes no han superado el duelo de un ser querido arrebatado de manos de la criminalidd o por la cepa del coronavirus, o bien, en otros será atipico, tal como la norma lo indica, separados, discretos, en familia con los que viven en el hogar, tal como lo indica las normas, los protocolos de salud y de la nueva normalidad de festejos.
El Covid-19 ha demostrado más eficacia que todos los productos chinos en su conjunto, llevamos conviviendo con ella más de nueve meses, se ha fortalecido volviéndose más fácil de contagiar, a quienes minimizaron sus alcances para quitar la vida los ha dejado ridiculizado, la ferocidad del coronavirus, de ese virus invisible, minúsculo pero poderosísimo tiene de rodillas a las principales potencias del mundo pero también a las naciones más pobres del orbe.
Se han presentado caso de negligencia en todos los niveles de gobierno, algunos empezaron bien, pero ya bajaron la guardia, callan mientras que ahora si esta creciendo el pico del que tanto se hablaba. Lo que veíamos en los noticieros televisivos de otras partes del mundo, ataudes al por mayor, colapso del sector, ya esta sucediendo en el país, cuánto tardará en llegar a provincia, realmente poco, más pronto de lo que nos imaginamos tiene a su favor el clima, las temperaturas frías en la mayor parte de la república mexicana, la negligencia de los ciudadanos y quienes viven en el centro del país han decidido viajar a los centros turisticos para alejarse según ellos de la infección y del confinamiento.
Mientras México se niega a seguir recibiendo vuelos de Inglaterra, Francia y otros países comienza a pedir a sus ciudadanos no viajar a México. No le tengo miedo al coronavirus, mas bien, es respeto, diversas enfermedades que he presentado desde la niñez nos obligan a estar en confinamiento, pero también el deber ciudadano con el resto de la población. Apague la navidad de convivió, de charlas presenciales, solo estaré estuve con tres de los seres que más quiero y que han estado con uno en las buenas y las malas, de igual forma será este año próximo año nuevo.
Si bien es cierto en la entidad se han presentado días sin muertos por la cepa, también es una verdad que tenemos más de 800 fallecimientos por el Covid-19, de igual forma que se siguen presentado infecciones mínimo 25 diarias, más estoy convencido que por la negligencia y la soberbia de muchos ciudadanos que no tienen porque andar afuera, se va incrementar en menos de quince días, el número de quienes estén infectados por esta pandemia, espero que nos equivoquemos.
Aunque muchos se resistieron la nochebuena y la navidad no fueron igual, de igual sucederá con los festejos del año nuevo. En esta nochebuena, navidad y año nuevo es diferente, no es igual, hay tristeza en el fondo, un virus nos ha hecho reconocer lo vulnerable que somos, las negligencias y soberbias con las que contamos, muchos esperabamos que saliera lo mejor de los seres humanos durante esta pandemia, más la solidaridad no se ha visto, políticos que no fueron capaces de donar algo para miles de familias de colimense donde el que provee la economía del hogar perdiera su trabajo o su fuente de ingreso.
Por las diversas calles de la ciudad comienza a circular fotografía de los diversos candidatos que no cuestan poco, serán los consejeros del IEE y el INE ingenuos para quedarse callados y ver como estos posibles candidatos están violando constantemente las leyes para el proceso electoral, si las autoridades electorales no ponen alto, serán el reir de tirios y troyanos.
Lo cierto esta nochebuena y navidad pasada, deberán ser para recordarnos como un ser llego en condiciones de humildad, esta es la manera apropiada de vivirla, algunos precisan que no es gratis que haya aparecido la estrella de Belen en esta ocasión durante la pandemia, es para recordarnos que la nochebuena es para reflexionar en silencio, de espiritu a espiritu, de saber qué quiere el creador para nosotros, no para derochar un amor que no existe y que solo es de palabra, ni de hechos.
Para despedirme. Esta navidad junto con lo que hemos vivido durante esta pandemia nos obliga a cambiar muchas formas, como dice la canción, lo pasado es pasado. Lo que llego ya no se va ir. Debemos y estamos obligados a cambiar nuestro entorno, la convivencia con el medio y nuestra sociedad. Solo me resta desearle que hayan tenido una buena nochebuena, donde reinará: paz, alegria y el amor.
Hasta la próxima.