PLAN ESTATAL 2016-2021
Por: Florencio Llamas Acosta*
La inercia, la ocurrencia y la improvisación ha sido uno de los rasgos que han distinguido el desempeño de los gobiernos en nuestro país, mismos que se reproduce en los estados y municipios. Estas prácticas subsisten a pesar de existir un marco legal que obliga y regula el sistema de planeación democrática para los tres niveles de gobierno. Sin embargo, la mayoría de las autoridades ven la elaboración del plan como un mero trámite que se debe cumplir, que se archiva y olvida.
La falta de una verdadera cultura de la planeación del desarrollo, ha provocado el estancamiento y desigualdad regional, ha generado ineficacia de las políticas públicas y despilfarro de recursos públicos en obras y acciones que responden a caprichos personales y no a demandas sociales. De igual forma, se adolece de planes con visión y acciones de largo plazo que de forma transexenal busquen resolver los problemas de fondo y transforme la realidad.
Es evidente la incongruencia entre lo que contiene el plan y lo que se ejecuta, basta con cotejar los informes de gobierno con lo registrado en el plan para reconocer el abismo que existe entre lo proyectado y lo ejecutado.
En Colima, el Plan Estatal de Desarrollo debe estar publicado a más tardar el 11 de agosto, como lo dicta el artículo 12 de la Ley de Planeación para el Desarrollo del Estado de Colima, el cual establece que deberá elaborarse y publicarse dentro de los seis meses contados a partir de la fecha de toma de posesión del gobernador. Para tal efecto, el 28 de abril se dio inicio a los trabajos para la elaboración de este documento al instalarse el COPLADECOL (Comité de Planeación para el Desarrollo del Estado de Colima) órgano responsable de la formulación y aplicación del Plan Estatal de Desarrollo.
El proceso continuo con la integración e instalación de los subcomités correspondientes y posteriormente del 14 al 27 de junio se realizaron los once foros temáticos que junto con una página web buscaron incorporar el sentir de los colimenses a través de 16 bloques temáticos.
En el artículo 3 de la mencionada ley establece que “La planeación del desarrollo es el instrumento fundamental para organizar las acciones de gobierno, identificar retos, oportunidades, metas, objetivos, elaborar diagnósticos de la situación económica y social del Estado y responder de forma ordenada, racional y sistemática a las demandas y aspiraciones de la sociedad.”
Sin embargo, es pertinente pena preguntarse si el próximo plan estatal de desarrollo 2016-2021 realmente recogen las demandas y aspiraciones de la sociedad colimense, o si es la visión técnica de expertos que de sus análisis definen lo que es bueno para la población o es la visión personal del gobernador Nacho Peralta.
Al respecto, considero que las estrategias de consultas públicas a partir de los foros fueron limitantes y excluyentes y no fomentaron la participación ciudadana. ¿Porque limitar a dos semanas la consulta pública, cuando de los 6 meses se pueden destinar 2 meses para ello? ¿Por qué centralizarlos en la capital cuando puedes replicar cada uno de los foros en los diez municipios y de esta forma todos los ciudadanos se sientan tomados en cuenta? ¿Por qué no adicionar a la página web, consultas en los espacios públicos donde la gente pueda con su puño y letra plantear su propuesta, pues no todos tienen la oportunidad de hacerlo vía electrónica?
Si en realidad se quieren dejar las simulaciones y hacer las cosas en serio, habría que ampliar la participación, ¿O usted como lo piensa?
*Maestro en Ciencia Política y Administración Pública. Catedrático de la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad de Colima.
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