LA ROQUESEÑAL DE NACHO

0

Por José Díaz Madrigal

El jueves pasado, la comisión de gobierno interno que conforma la actual legislatura del Estado de Colima; acordó reunirse en pleno por última ocasión, el próximo martes 31 de agosto. El objetivo es, clausurar el periodo ordinario y, aparte elegir a los diputados que integrarán la comisión permanente del congreso, que va a coordinar los trabajos de entrega recepción para la siguiente legislatura; la número LX que entra en funciones el primero de octubre del año en curso.

El cuerpo legislativo que está feneciendo, perdió una oportunidad histórica de ser una de las más brillantes que se tenga registro. El caso es que no cumplió con su responsabilidad como es debido. Lo tenían todo para ser bien recordados en los anales de debates de la cámara de diputados. Era la primera vez en los tiempos modernos, que el ejecutivo tenía una amplísima mayoría de legisladores de oposición, que en teoría no estaban atados a las órdenes del gobernador. Sin embargo tal parece que no fue así, queda la impresión de que Nacho controló el poder legislativo.

En el encabezado de un medio de información local de la semana pasada, refiere el retraso histórico como nunca había sucedido, de la legislatura que termina en unos días. No existe precedente de una situación similar, estos diputados que se van; dejan un legado de pereza y apatía por lo que les tocaba hacer. Heredan para los nuevos congresistas, más de 200 iniciativas que no se revisaron. Dentro de las iniciativas que mañosamente no quisieron analizar, sobresalen: la de eliminar el pago de gasolina, telefonía y bonos de ahorro de que gozan los diputados. La iniciativa que regula el sueldo de los servidores públicos. La iniciativa de ley, para modificar el mecanismo de nombramiento de los magistrados del Supremo Tribunal de Justicia del Estado de Colima, por otra ley más justa y adecuada para los jueces de carrera. La iniciativa de ley de participación ciudadana. Además una agravante mayor, que fueron los vergonzosos y negligentes trabajos de fiscalización de los millonarios créditos que autorizaron y entregaron al Gobierno Estatal.

La deuda creció casi al doble, desde que Nacho tomó las riendas del gobierno. No obstante en el ejercicio fiscal del 2019, hubo un remanente grande de dinero por recaudación; no se sabe a donde fue a parar. La Secretaria de Salud, de Educación y Seguridad Pública; fueron las dependencias más afectadas.

La opinión de la población es generalizada: La de Nacho ha sido un pésima administración. Deja a Indira un panorama bastante complicado para el arranque de su gobierno. Mal hace la joven política de Cuauhtémoc, al aceptar resolver los problemas a Nacho, admitiendo que el gobierno del centro le adelante las participaciones que por ley le corresponden hasta el periodo en que ella tome posesión de su cargo. Aunque nunca sucedería, las sugerencias sociales de que Nacho hubiera renunciado y dejar a Indira que termine de resolver la compleja situación en que se ha transformado el pago de salarios, parecía una alternativa, que al fin y al cabo, se trata de los recursos que le corresponderán a ella como administradora del estado.

Nacho ha sido un desgobernador como pocos, escasos compromisos los cumplía. Buena parte de su tiempo no estaba en Colima. A diferencia de otros gobernadores colimotes del pasado, no se dejaba ver entre el pueblo; sí se pedía audiencia, no atendía. Las pocas veces que alguien lograba acercarsele después de algún evento público, se le notaba esquivo, rodeado de guaruras y en realidad no resolvía, justificando que el asunto de que se tratara, lo tenía que ver con algún colaborador, propinando carpetazo al tema que fuera. Pero no haya sido alguno de sus preferidos, porque se ponía de pechito.

Tal para cual, dice despectivamente un popular refrán. Ni al ejecutivo ni al legislativo les importó el pueblo trabajador de Colima, compuesto la inmensa mayoría de personas capaces; ya sea la burocracia estatal, el magisterio o la misma Universidad de Colima, que también padece el impago.

Al iniciar el año de 1995, en el Congreso de la Unión se discutía el incremento del IVA del 10 al 15%. Los legisladores del PRI  eran mayoría. Humberto Roque Villanueva era el jefe de esa bancada, este tenía la orden presidencial de que se aprobara el dictamen. Toda la oposición se resistía al incremento, pero el PRI sin miramiento alguno; aplicó la aplanadora mayoritaria aprobándose la ley entre la rechifla de los adversarios. Para burlarse de estos, Roque Villanueva les hizo con las manos y la cadera la señal, convirtiéndose así, en la famosa ROQUESEÑAL.

Todo parece que Nacho está imitando en sus últimos días como gobernador, el ademán de la ROQUESEÑAL.