Rincón de la Conciencia
Por: Antonio Valdés
Muchas personas cuando se enteran que tuve cáncer me miran con cara de pena, quizás pensando todo lo que esta enfermedad significa…pero a la vez no saben que Dios no nos trae la enfermedad, simplemente permite que suceda porque Él siempre tiene un propósito de tras de todo esto. Muchas veces no sabemos cuál es… pero basta saber que su infinita sabiduría y perfecto amor ha determinado es lo mejor para nosotros. Dios nunca desperdicia dolor… lo usa para Su Gloria y nuestro bien. No voy a negar que haya momentos muy difíciles, que hay lágrimas y temor, pero se disipan cuando decido ir a Su presencia. ¡¡Hay tantas cosas, que aprendí en ese tiempo!! ¿Sabes? Me avergüenza pensar en tantos años viviendo cómodamente y desperdiciando tiempo, oportunidades, ocupándome de tener mis prioridades cambiadas, de pensar que hay tanto tiempo cuando realmente no sabemos nada acerca de lo que nos queda de vida… Por eso, por la oportunidad que Dios me da de darme cuenta de tantas cosas que debo cambiar en mi vida… ¡Gracias Señor por el cáncer!
Pienso en mi vida…¡¡Cómo corro de un lado a otro y…me llevo el mundo por delante!! ¡¡Cómo olvidé de disfrutar de amar a mi hijo y familia cercana, momentos, oportunidades, de escuchar a otros…!! Ahora hay cosas que no puedo hacer, que dependo de otros, que muestra que mi autosuficiencia ya no sirve…no la tengo, no alcanza… ¡¡Gracias Señor por el cáncer!!
Pienso en mis sueños, mis planes futuros, mis metas a largo plazo…y te puedo asegurar que tenía todo mi año totalmente planeado…¡¡Cuánto me costó entregarle todo a Él!! Abrir mis manos apretadas con mis propios sueños y deseos y dejarlos en Sus manos… Confiar que Él sabe que es lo mejor para mi… y que me devolverá aquellos que sean los que ha seleccionado para mi vida, que quizás haya otros nuevos que nunca habría elegido, entender que todo es mejor en sus manos…que en las mías. ¡¡Gracias Señor por el cáncer!!
Pienso ahora en mi futuro, ¿en qué he de invertir el tiempo que me queda de vida?, y ¿en qué invertiré de ahora en adelante mis fuerzas? No desperdiciaré mas las oportunidades que estén frente a mí para hacer lo que sé que tengo que hacer, y para lo que Dios me permitió vivir, estas oportunidades son de oro y nunca les valoré como debiera…me avergüenza, te lo aseguro que no volverá a pasar…pero sabes…¡¡Ahora tengo la oportunidad!! ¡¡Gracias Señor por el cáncer!!
“Nuestra vida tiene un propósito en el tiempo, no la desperdicies, debemos hacer todo prontamente en esta corta vida que tenemos mientras viajamos para llegar a la eternidad, recordando que el Señor está cerca, porque el tiempo es corto” Y por esta bella oportunidad y privilegio de aprender que Dios me ha dado…¡¡¡agradezco al Señor por el cáncer!!! Tengo un bello privilegio (de conocer más mis propias debilidades y conocer más a un Dios maravilloso que desea cambiarme) y una nueva oportunidad…¡¡No quiero desperdiciarla viviendo para mí!!
¡Gracias Señor por el cáncer!
*Las opiniones expresadas en este texto de opinión, son responsabilidad exclusiva del autor y no son atribuibles CN COLIMANOTICIAS.