Redacción|COLIMANOTICIAS
Colima, Col.- El rector José Eduardo Hernández Nava, en el último acto oficial realizado el año pasado, premió a cien trabajadores de servicios generales y personal secretarial de la Universidad de Colima, por su excelente labor cotidiana y compromiso institucional, con un estímulo económico equivalente a un mes de su salario base.
José Eduardo Hernández, al entregar estos estímulos, dijo que para la Universidad de Colima es muy importante reconocer la labor de sus trabajadores, porque es gracias a su desempeño que la Universidad funciona de manera correcta. “Lo he dicho desde que asumí el cargo y lo refrendo ahora: gracias a todos y cada uno de los universitarios, y sólo con el trabajo de todos y cada uno de ustedes, este proyecto rectoral tendrá éxito”.
Comentó además que los premiados deben sentirse orgullosos de recibir el estímulo porque son los mejor evaluados según los criterios que se aplican para seleccionar a los merecedores del premio.
Los criterios a considerar son la Evaluación del desempeño que realiza el jefe inmediato de cada trabajador; la Educación Continua, referente a la cantidad de horas en capacitación que ha tenido el trabajador durante el año; las Incidencias; esto es, la asistencia y puntualidad en los centros de trabajo, y la Participación Sindical.
Una de las preocupaciones de esta gestión rectoral, dijo Eduardo Hernández Nava, “es mejorar la calidad de vida de los universitarios, en particular su dimensión material, y una manera de lograrlo es a través de estímulos económicos permanentes”.
Para otorgar dichos estímulos, la Universidad de Colima recibió recursos por parte de la Secretaría de Hacienda, que sumaron 3.4 millones de pesos provenientes del Fondo de Apoyo a Problemas Estructurales de las Universidades Públicas, los cuales se destinan a la promoción del personal secretarial y de mandos medios.
El rector agradeció el desempeño que los trabajadores ponen día con día y el cariño que demuestran a la universidad. “Quiero que estén tranquilos: esta institución tiene la capacidad y la fortaleza para asumir sus compromisos económicos, educativos y sociales”.
Finalmente, les dijo que hará todo lo posible por seguir mejorando sus condiciones de trabajo, como la entrega de uniformes y calzado para que puedan desempeñar mejor sus actividades, “porque ustedes fortalecen la identidad universitaria, y estoy convencido: un trabajador, identificado con su lugar de trabajo y feliz, se desempeña mejor”.
Carmen Silvia López Andrade, quien habló en nombre de los que recibieron los estímulos, dijo que era una adolescente cuando tuvo la oportunidad de ingresar a trabajar a la Universidad de Colima como secretaría: “aprendí a escribir en aquellas enormes máquinas mecánicas Olivetti, y desde entonces he continuado aprendiendo, hasta escribir ahora con esas computadoras que son una mejor tecnología”.
Añadió que todo ese aprendizaje continúa siendo posible gracias a los esfuerzos que la institución realiza al capacitar a sus recursos humanos. “Por eso me siento orgullosa de pertenecer a esta gran familia universitaria, porque ha aprendido y crecido como persona gracias al apoyo de la Universidad”.
Carmen Silvia López, en un discurso muy emocionado, resaltó que la Universidad “puede contar con todos nosotros, sus secretarias y su personal de servicios generales, porque tiene en nosotros a un personal de calidad en quien puede confiar. Somos un ejército disciplinado de trabajadores universitarios que vive día a día con una calidad de vida extraordinaria, gracias a todos los apoyos que recibimos”.