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México.- La emergencia sanitaria por Covid-19 ha hecho que repensemos la forma en la que limpiamos nuestros espacios, a fin de evitar cualquier riesgo de contagio de esta u otras enfermedades.
Uno de los principales factores para tener un hogar saludable es tener la menor cantidad de polvo posible, ya que la presencia de éste significa, indudablemente, la presencia de ácaros.
Como lo menciona MSN en su publicación, estos organismos están en cualquier rincón del hogar donde se acumule polvo, y se reconoce a los ácaros domésticos como la fuente principal de alérgenos en interiores y uno de los peores enemigos para nuestra salud en casa.
Los ácaros pertenecen a una familia de arácnidos de los cuáles existen casi 50,000 especies clasificadas de entre 100,000 y 500,000 aún desconocidas.
La mayoría de estos organismos no son visibles al ojo humano y alcanzan entre 0.2 y 0.5 milímetros de longitud. Están distribuidos en todo el mundo y han podido adaptarse para vivir en todos los medios conocidos del planeta.
El rango de temperatura para su reproducción es muy amplio, yendo desde los 5 a los 30 grados centígrados, siendo los 25º C la cifra óptima.
Dentro de una casa, los ácaros tienen mayor presencia en almohadas, colchones, alfombras, muebles forrados con tela y artículos fabricados con peluche.
No obstante, se calcula que únicamente 25 de las especies identificadas de ácaros, están relacionadas con alergias en el ser humano.
Otro punto importante a considerar es que los residuos fecales de los ácaros son los que poseen el mayor activo alergénico, y poseen la capacidad de ocasionar los síntomas de alguna enfermedad respiratoria, incluso tras la muerte del microorganismo. Adicionalmente, para que un grupo de ácaros domésticos produzca una alergia como el asma, la presencia de estos debe ser de entre 100 y 500 ácaros por gramo de polvo.
Frente a este contexto, sabemos que es posible evitar que los ácaros se conviertan en alergias, para ello existen medidas muy simples pero efectivas que se pueden aplicar en el hogar, ayudando a reducir significativamente el grado de exposición a estos alérgenos para quienes habitan una casa, entre las que mencionamos las siguientes:
Según el portal web Salud180, es recomendable utilizar fundas antiácaros para cubrir el colchón y las almohadas. Además, éstos deben aspirarse una vez al mes durante 10 minutos y darles exposición a la luz solar al menos 2 o 3 veces al año durante 30 minutos.
La limpieza diaria de la vivienda es indispensable, sobre todo en estos momentos. Además de las habitaciones, retira todo el polvo de casa, de muebles y aparatos.
Con información de MSN