¡BÚFALO!

0

Rincón de la Conciencia

Por Antonio Valdés Mejía

En el sur oeste asiático el búfalo es conocido como “El tractor de oriente” debido a la utilización de su fuerza para el trabajo pesado en las tierras. Un búfalo puede llevar cargas hasta un poco más de 1,300 Kilos, sin duda tiene una fuerza tremenda. Es famoso por su furia, fortaleza y no es fácil para los cazadores experimentados el poderlo atrapar. Es sinónimo de fuerza, y es imparable para lograr sus objetivos de defensa y supervivencia.

¿Será que nosotros podríamos con 1,300 kilos sobre nuestros hombros?, creo que es casi imposible, por no decir imposible.

Lastimosamente nosotros muchas veces somos tan débiles, que con un kilo de problemas ya queremos tirar la toalla. Todos en algún momento de nuestra vida hemos sentido como nuestras fuerzas decaen casi hasta desaparecer.

Cuando un búfalo se ve amenazado por algún depredador, el comienza a mover constantemente la joroba que está en su espalda y esa joroba comienza a distribuir por todo su cuerpo la grasa o aceite de la cual ella tiene y cuando el depredador bien al ataque, sus grasas resbalan por el aceite o grasa sobre la piel del búfalo.

Asimismo Dios pone sobre ti su aceite, la cobertura de su Santo Espíritu y aunque el depredador, el enemigo de Dios y sus hijos vengan a atacarte sus garras resbalarán y no te tocarán a causa de la unción de Dios sobre tu vida.

Levántate, porque hoy sus fuerzas son aumentadas y una nueva unción de aceite fresco de Dios viene sobre ti.

Dios quiere ungirnos con aceite fresco cada día para que nuestra relación personal se renueve así como también sus misericordias son nuevas cada mañana, así también el aceite de nuestra vida puede ser fresco y renovado cada día para así tratar la manera de agradarle en TODO.

Padre celestial, declaro en el nombre de Jesús que hoy tu aumentas mis fuerzas como las de un búfalo, me unges con aceite fresco y me preparas para continuar el camino en el cual Tú me has colocado y venceré a todo depredador que quiera o pretenda atacar mi vida y la de mi familia.