EPISODIO POSTELECTORAL
Por: Carlos Orozco Galeana
Jamás creí que con la votación del 7 de junio pasado se cerraba un ciclo en la que se elegiría a representantes populares con gobernador incluido y más si se presentase, como ocurrió, un final tan apretado. Y acerté. Las cosas se dificultaron porque un candidato perdedor no se asumió ni se asume como tal y ahora serán los tribunales los que certificarán actos ya validados por organismos locales.
Jorge Luis Preciado, en su afán de enturbiar la victoria legítima de su contrincante, no ha dudado en esgrimir argumentos sin sustento, tal como lo ha demostrado el representante priísta ante el IEE, Rogelio Rueda Sánchez, quien puntualmente ha dado respuesta a acusaciones desmintiendo las razones fundantes de la demanda panista y dando certidumbre en la etapa postelectoral tanto a su partido como a los ciudadanos pendientes del suceso.
Rogelio Rueda, quien ha destrozado con documentos en mano una prueba tras otra del Pan, dice que las acusaciones son puras ocurrencias en tanto que él sí ha demostrado sus actuaciones. Si acudió, por ejemplo, al IEE cuando se calificaba la elección, fue para documentar a su suplente en la persona de Jorge Carlos Ramírez Marín independientemente de la comisión que ostenta ante ese cuerpo colegiado por parte del Pri. De igual forma, lamenta que aquel partido descalifique la tarea de ese órgano electoral que le otorgó victorias muy importantes y descalifique eventos donde no ganó, y finalmente opina que no se puede cuestionar mañosamente al IEE ya que cuando hay parcialidad evidente no se dan resultados tan diversificados como los obtenidos en Colima.
La acusación principal de Acción Nacional es que “se inyectaron las urnas”, lo que me parece una tontería grandísima porque en cada casilla hubo representantes – funcionarios de todos los partidos, mismos que revisaron y firmaron las actas de escrutinio de la votación y las remitieron a cada comité municipal electoral, y luego al estatal. El conteo voto por voto, casilla por casilla exigido dio más luz acerca de la elección y clarificó el dictamen de la voluntad popular. Ya Ignacio Peralta ha ganado tres veces a estas alturas. A nivel gabinete recibió también el beneplácito de Luis Videgaray.
Ante esa visión deformada, el vocal ejecutivo de la Junta Local del INE, Luis Garibi Harper y Ocampo, descartó la inyección de las urnas en la elección a gobernador. Explicó que la diferencia de la votación total entre la elección de gobernador y la de diputados federales de mayoría relativa tiene una explicación muy simple; se debe a que los representantes de los partidos políticos y la gente que votó en casillas especiales, en muchos casos, sólo sufragó para la elección de gobernador.
Recordó a los medios que un acuerdo del Consejo General facultó a los representantes de los partidos políticos a que pudieran votar en la casilla donde estuvieran aunque no pertenecieran a esa sección. “Por ejemplo, si el representante de un partido político vive en Colima y estaba en una casilla de otro municipio, fuera de su distrito electoral federal, entonces pudo votar por gobernador pero no por diputados federales de mayoría relativa porque no son los de su distrito”, dijo. Otro factor que generó que no fuera la misma votación en las elecciones de gobernador y diputados federales son las casillas especiales, pues se abrieron tres.
El conflicto se resolverá en otras instancias que deberán respetar la voluntad ciudadana y las leyes. Entiendo que Preciado Rodríguez debe sentirse mal, triste y encorajinado, porque no alcanzó su propósito, pero no por ello ha de descalificar a toda la gente que participó en la elección, y menos a los representantes de su partido que avalaron los resultados. Es bueno que se reincorpore a su labor como senador, en donde olvidará poco a poco su tropiezo.
Al examinar el proceder de los partidos y sus candidatos, los tribunales examinarán la gravedad de las acusaciones de cada parte y optarán por hacer a un lado las minucias concentrándose en lo esencial: el partido de Jorge Luis triplicó el gasto de campaña, digamos que arrasó a sus contrincantes dejándolos indefensos. Tendría que explicar de dónde obtuvo ese financiamiento. ¿De su alcancía ? Lo dudo. Muy a tiempo, Rogelio Rueda denunció este hecho ante la FEPADE, que pesará seguramente en el ánimo del Tribunal electoral federal al dar su fallo. La actuación transparente de este priísta ha sido eficaz y por ello se sitúa en un plano preferente al interior de su partido de cara a la nueva época que este tendrá que vivir para recuperarse en tres años de la pérdida de ayuntamientos y alcaldías.