En el lugar el representante social aseguró una pistola escuadra Pietro Beretta, calibre 9mm, así como un casquillo percutido.
Conforme a las primeras investigaciones y a lo manifestado por la esposa del finado, señaló que el pasado 22 de los corrientes José Martín, llegó a su casa como a las once cuarenta y cinco de la noche, y se dirigió a la sala de su casa a ver la televisión, mientras ella seguía atendiendo una tienda de abarrotes que se encuentra al otro lado de su vivienda y que es propiedad de su mamá.
Agregó que luego su esposo fue a acomodar mercancía y después se regresó a seguir viendo la televisión, mientras ella cerraba el negocio.
Señaló que luego paso por la sala y no observó a su esposo por lo que no le dio importancia porque sabía que se había ido a costar a su recamara, pero a los pocos segundos escucho una detención y de inmediato fue hasta la habitación, encontrando a José Martín en el suelo, sangrando de la cabeza.
Añadió que llamó a la PGJE para informar lo ocurrido y solicitó que le enviaran una ambulancia de la Cruz Roja, en la cual fue trasladado con vida el lesionado hasta un nosocomio donde finalmente falleció cuando recibía atención médica.
Finalmente expresó que desconoce cuales fueron los motivos que orillaron a su cónyuge a quitarse la vida.
Hasta el nosocomio se trasladó el Ministerio Público quien ordenó el traslado del cadáver al SEMEFO, para que se le practicara la necropsia de ley, que conforme a los resultados de la misma, la gravedad de la lesión fue lo que provocó la muerte de José Martín.
Cabe señalar que José Martín Pérez de León, había ingresado a trabajar a esta dependencia el pasado mes de enero del año en curso, una vez que aprobó los diversos exámenes abalados por el Sistema Nacional de Seguridad Pública, mismos que son aplicados por el Centro de Capacitación de esta dependencia.
El Gobierno del Estado a través de la Procuraduría General de Justicia, continuará trabajando todos los días para lograr la captura de quienes en el pasado o el presente han cometido hechos delictivos que vulneren los valores fundamentales de la sociedad en que vivimos, dando con ello muestra de que en Colima, no habrá impunidad.
Se hace un llamado a la población en general para que denuncie de manera anónima hechos delictivos a la PGJ a los teléfonos gratuitos: 01 800 581 l770, 01 800 506 8360, así como al 01 800 830 6415 de atención a víctimas y prevención del delito.