PUPITRE AL FONDO

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Inicio de ciclo escolar: novedades

 

Por: Blanca F. Góngora 

Acaba de iniciar el ciclo escolar 2016-2017 en educación básica, lo cual implica, además de numerosas esperanzas renovadas, muchos proyectos conjuntos en los diversos colectivos escolares.

Si bien los alumnos iniciaron clases el lunes 22 de agosto, el arduo trabajo que precedió a su ingreso es algo que es necesario subrayar, pues sus profesores estuvieron reuniéndose con una semana de anticipación en sus respectivos planteles para llevar a cabo los ejercicios de planeación de lo que se ha dado a bien llamar su “Ruta de Mejora Escolar”. Si retrocedemos, incluso, aún más lejos, necesario es mencionar también que los directores de dichos planteles también tuvieron que congregarse con mayor antelación (en la semana del 8 al 12 de agosto) con el mismo objetivo que el profesorado, lo que indica una labor (de suyo intensa por la organización que exige) que generalmente los padres de familia y la sociedad en general no alcanza a percibir. Previamente a estas reuniones, por ejemplo, también hicieron lo propio todos los supervisores, encargados de vigilar el buen funcionamiento del quehacer escolar en  nuestra entidad. Refiero este trabajo previo porque, como he dicho, pocas veces se advierte que un inicio de clases lleva una intensa preparación previa que, aunque no perfecta, intenta no dejar lugar a las improvisaciones, lo que implica una planeación y un trabajo colegiado de los docentes quienes tienen como fin primordial elevar la calidad de la educación que se brinda en sus escuelas.

Inicia el ciclo y,  entre las novedades (además de las protestas y paros en contra de la Reforma Educativa), resalta una de ellas: las escuelas decidieron si seguirían un calendario escolar de 185 o 200 días.  En Colima solamente un preescolar, un centro de atención múltiple de educación especial y tres primarias eligieron el de 185 días,  y a nivel nacional solo el 6%  por ciento de las escuelas  optaron por este mismo, siendo en realidad un porcentaje mínimo, lo que  revela una resistencia mayoritaria a esta propuesta. Los maestros dijeron: NO. Y sus razonamientos fueron respetados, y me alegra, porque quiénes mejor que los docentes para saber lo que más conviene a sus alumnos y a sus centros escolares.

 

@BlanquiFG   

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