Expuso que los motivos se fundamentan en que su actuar es un tanto light y gris, pero además no es capaz de promocionar a esta institución, incluso lo que hacen y en muchas de las ocasiones “decimos que aquí no hay quejas, no porque no haya violación a los derechos de la gente, sino porque no hay cultura de la denuncia”.
Explicó que si no hay una cultura de la denuncia también se debe a que no se ha logrado poner una línea divisoria entre lo que es un sistema de gobierno y una comisión de derechos humanos, por lo tanto, la gente dice: es lo mismo, para que me voy a quejar del judicial con los derechos humanos si son del gobierno los dos.
Por lo antes expuesto, manifestó en entrevista que debe haber una Comisión Estatal de Derechos Humanos más fortalecida, con mayor autonomía e independencia, pero sobre todo, subrayó, con mayor promoción para que la gente empiece a creer en ellos y que sepan que es una institución que les va a responder.
Puntualizó sobre la necesidad de que hace falta que se incremente mucho más la cultura de la denuncia.
Al abordar lo relacionado a la selección del personal que integrarán el Consejo de la Comisión Estatal y que ya en el mes de marzo venció el plazo para los diez actuales consejeros, quienes vienen laborando sin goce de sueldo, dijo que de las propuestas recibidas ya tienen 7 propuestas y solo faltan tres más por consensar.
Sobre la visita de José Luis Soberanes a la entidad, consideró que prácticamente vino a darle un apapacho tanto al gobernador como al titular de la CEDH, de quien no me queda claro si efectivamente tiene un excelente trabajo.