PERGAMINO BALOMPÉDICO

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Alex Carbajal Berber|ULTRAMEDIA

La lucha por el arco

Miguel Herrera, llegado el momento, deberá decidir quién será el titular en el arco de la selección mexicana en Brasil 2014. Lo que se espera, y es un deseo imperioso, es que la elección no sea tan desafortunada como la de Javier Aguirre hace cuatro años, cuando revivió –literalmente- en el arco a un veterano en el que inexplicablemente aún confiaba para un torneo de tal magnitud, Oscar “Conejo” Pérez.

Entre otras cosas, desafortunada la elección, pues frenó el progreso evidente de uno que había hecho números para aspirar a la portería mundialista: Guillermo Ochoa.

Para este torneo mundialista, Miguel Herrera deberá decidirse entre varias opciones, entre los que principalmente destacan cuatro: Ochoa, Moisés Muñoz, Alfredo Talavera y José de Jesús Corona, de entre los cuáles la opción más débil, pareciera, es el portero del Toluca, quien vio en la salida del “Chepo” de la Torre, grandes posibilidades de adiós al torneo veraniego.

Si nos vamos a méritos, es hora de que Guillermo Ochoa sea el titular en un evento de gran nivel. La personalidad y la madurez que ha mostrado el ex portero americanista es de considerarse, tomando en cuenta el veto silencioso que curiosamente se vertió sobre él una vez que abandonó las filas del club de Coapa libre de contrato, es decir, en contra del famoso pacto de caballeros del futbol mexicano, utilizando la Ley Bosman que protege a los jugadores del primer mundo futbolístico.

En la Ligue 1 de Francia, el portero azteca ha hecho gala de sus habilidades en el arco, mejorando incluso en la única debilidad que lo embargaba durante gran parte de su paso por el balompié nacional, las salidas en las jugadas a balón detenido.

Jesús Corona busca una revancha. Hace cuatro años fue víctima de su mal genio, lo que le costó ser excluido de la selección nacional, en un duro castigo que seguramente todavía lo acosa. Su calidad es indiscutida, a expensas de que su temperamento vuelva a cobrarle factura en las vísperas del torneo brasileño.

Moisés Muñoz tiene una gran ventaja, es el portero del club de donde proviene Miguel Herrera. Partiendo de ahí, se le debe reconocer un gran trabajo de recuperación posterior a su accidente automovilístico, lo que le valió regresar a los primeros planos de un futbol donde ser portero del América te da más de medio boleto a la selección; si no, pregunten por Adrián Chávez y/o Adolfo Ríos.

Visto desde ahora, el titular, por merecimientos y respeto ganado, debería ser Memo Ochoa. Pero es que en el futbol mexicano cualquier cosa sucede. Javier Aguirre lo demostró con el “Conejo” Pérez en la Copa del Mundo anterior.