Corderistas contra maderistas en Colima: un PAN desmigajado
Por: Rogelio Guedea
Las imágenes no mienten: la próxima elección del líder nacional del Partido Acción Nacional ha dividido aún más a los panistas de Colima, ya de por sí en conflicto intestino. La primera imagen muestra a los corderistas, un grupo conformado por panistas de mayor renombre: Raymundo González (al frente) rodeado de Jesús Dueñas, Antonio Morales, Héctor Insúa, Patricia Lugo, Elías Martínez y Salvador Becerra. La segunda imagen muestra a los maderistas, un grupo más deslucido, salvo por la presencia omnisciente y omnipotente de Jorge Luis Preciado. Estos son: Pedro Peralta Rivas (al frente) y el ex alcalde de Villa de Álvarez Felipe Cruz.
Está más que claro qué busca cada una de las piezas del rompecabezas (a parte de las aspiraciones personales de cada uno). Pedro Peralta Rivas, por ejemplo, la dirigencia del PAN, luego de que fuera anulada la anterior elección, y el grupo de Raymundo González lo mismo: aspiran, con Salvador Fuentes, a tener de su lado el liderazgo del partido de cara a las elecciones por la gubernatura de 2015, pues saben que de perder dicho liderazgo muchas piezas del rompecabezas (ahí está la imagen y los nombres) se extraviarían.
Hay algo que no prevén los panistas: que si no logran unirse luego de pasada la elección del líder nacional del PAN (gane Cordero o Madero), la derrota en las elecciones de junio de 2015 la tendrían garantizada. Conociendo la realidad de la condición humana, este presagio se impone. Pero siendo todo un organismo vivo, nada está, por tanto, escrito. Lo que sí es invariable es lo siguiente: los panistas no ganarán ninguna elección uniéndose al PRD (un zombie en nuestro Estado), sino uniéndose ellos mismos. No está afuera, sino adentro la solución a sus desatinos. Buscar una elección democrática y transparente de su líder local podría ser un buen principio.
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