TAREA POLÍTICA

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PERALTISTAS ASUSTONES

Por: José Luís Santana Ochoa

La ultra peraltista disfrazada con los desteñidos colores y  las desgastadas siglas del Partido Revolucionario Institucional, hipócritas, se desgarran sus vestiduras porque, según ellos, al diablo que se les apareció cuando menos lo esperaban, Jorge Luís Preciado Rodríguez, su villano favorito, le encanta agarrar la jarra, cuando todo mundo sabe que los que no toman y usan lentes obscuros hasta de noche no son de fiar. Desesperados de ver que el combativo y sagaz  político de profesión que es el panista, se fortalece, crece como las vejigas,  entre más le tunden sus adversarios políticos, los peraltistas ven  el vaso jaibolero en la diestra de Jorge Luis y no las copas ni las botellas en las cuidadas manitas de su candidato que con frecuencia, acompañado de sus cuadernos,  suele ponerse hasta atrás, igual que en el pasado lo hizo la mayoría  de gobernadores priistas, dos o tres de ellos famosos por llevar serenatas muy pasados de alcohol y algo más, y por haber sido cargados de cantarito por sus guachomas de confianza  en varias ocasiones. Del presidente del CDE del PRI, ni escribir, pues más que sabido es que de ‘casta le viene al  galgo’.

Finitos como son los señoritingos peraltistas, clasistas igual que su engreído, soberbio y díscolo muchacho que empecinado está en ser gobernador aunque los colimenses lo rechacen, ven con desprecio, desdén y hasta odio, a quien proveniente del pueblo-pueblo les ha dado dura batalla cuando pensaban que ya tenían el camino allanado hacia la gubernatura gracias a que lograron doblegar al ex alcalde porteño Virgilio Mendosa Amezcua, por mucho el mejor posicionado hace seis meses en las preferencias electorales de los colimenses. No sólo le impidieron al ahora diputado federal plurinominal verde ecologista contender en el pasado proceso electoral, sino que lo obligaron a promover el voto de los porteños a favor del pésimo candidato que fue José Ignacio Peralta Sánchez, servicio que no resultó como lo esperaban y exigían, pues éste perdió la partida en el Puerto por seis mil votos y por ello lo traen de bajada desde hace rato ya.

Han pasado cinco meses de las elecciones del domingo 07/06/2015 y JIPS y sus incondicionales continúan entripados con quien sueñan y ven hasta en la sopa, el causante de todos sus fracasos, desgracias y frustraciones, el rosillo de la sierra, Jorge Luís Preciado Rodríguez, a quien saben que si vuele a correr en la extraordinaria, el alazán de la clase ilustrada de Colima, el que se comunica en inglés, el aromatizado a Pinos, el que estudió en el ITAM y en Essex University, esta vez  no le verá ni el polvo. Por eso los peraltistas quieren sacarlo a toda costa de la jugada para que su pasmado caballo sólo tenga como cabestro al impredecible y ‘petaquilla de nadie’ Leoncio Morán Sánchez, esquirol de la alternancia política en la gubernatura del estado que durante las últimas casi nueve décadas el PRI ha usufructuado a placer la pandilla priista.

Al adjudicarle sus interesados promotores todas las virtudes habidas y por haber a su gallo trespeleque José Ignacio Peralta Sánchez, incluidos su aroma a Pinos, bilingüismo, proveniencia de la clase ilustrada de Colima y tener como almas madre al ITAM y a Excces University; y todos los defectos al su enemigo a vencer, Jorge Luís Preciado Rodríguez, la mayoría de ellos vistos como valores y cualidades por los amplios sectores populares de la sociedad de Colima que representan el 80% del electorado, polarizaron la disputa de la gubernatura hasta dejarla definida como una entre privilegiados y jodidos, entre los de arriba y los de abajo, entre perfumados y sucios que  le provocan ‘asquitos’ a JIPS como el carnicero del Mercado 5 de Mayo de la ciudad y puerto de Manzanillo.

Sabedores de la tunda electoral que le espera a Nachito ante Jorge Luis, los peraltistas asustones han lanzado sus plañideros gritos hacia la Fepade para que resuelva más rápido que inmediatamente la denuncia presentada por el tricolor contra Jorge Luis Preciado y el PAN, por supuesta falsificación de documentación electoral en las pruebas presentadas ante el Tribunal Federal que anuló los comicios de Gobernador, abrigando la quimérica esperanza de que lo inhabilite para no pueda de nuevo contender. ¡De este tamaño es su ‘apanicamiento’!. Por supuesto que nadie les desfacerá el entuerto ni les enderezará a su jorobado José Ignacio Peralta Sánchez.

EL ACABO

  • El “kid” Peralta Sánchez no es fajador, mucho menos peleador callejero. Sus managers le cambiaron equivocadamente su modosito estilo y se los van a noquear. Al tiempo.
  • Pésimos armadores de escándalos han resultado ser los orquestadores de la guerra sucia peraltista. En la más reciente utilizaron al compañero de jogging de José Ignacio y hermano de un lidercillo sindical allegado al truculento Arturo León Alam.
  • José Ignacio Peralta Sánchez sigue con su tónica de dejar colgada a la gente. El martes anterior les tocó el turno a los reporteros porteños que se quedaron esperándolo para colearle el desayuno en el restaurante del Hotel Colonial, retirándose más hambreados de lo que llegaron. Como siempre, no tiene la culpa el sindicato sino quienes, sabiendo cómo se las gasta, siempre caen en su juego.