Alex Carbajal Berber|ULTRAMEDIA
La dupla de moda: Messi-Neymar
Johan Cruyff ha puesto en duda la conveniencia de formar la dupla Messi-Neymar en el Barcelona, en este momento. Han pasado algunos partidos, y la consecución de un solo gol por parte del brasileño ha generado dudas sobre lo que vendrá, sumado a su diagnóstico de anemia, por la pérdida de siete kilogramos después de la Copa Confederaciones.
Mientras en Real Madrid se debaten entre pagar 70 o 100 millones euros por Gareth Bale, como si cualquiera de estas cifras fuera justificada, en Barcelona ceden a los canteranos a otros clubes y ligas, pues la base catalana ha resultado ser inamovible desde hace casi un lustro.
Esta base necesita ciertos perfeccionamientos, que será la fase más complicada para el nuevo entrenador, Tata Martino. En el Barsa había necesidades muy puntuales: la de un defensa central de calidad que vaya haciendo más sencilla la posible salida de Carles Puyol, y un delantero centro, extremo o mediapunta, que acompañara a Lionel Messi en la responsabilidad de hacer goles.
Quizá el más afectado por la contratación de Neymar será el chileno Alexis Sánchez, quien la temporada pasada quedó a deber en cuanto a rendimiento en goles. La tradicional línea de tres delanteros de los blaugranas estará conformada casi seguramente por la dupla Messi-Neymar y un tercero en el que lleva preferencia Pedro Rodríguez, sobre Alexis y Tello.
Esta dupla no explotará de forma inmediata. Habrá un proceso de adaptación natural, en la que Neymar también deberá entender que el líder absoluto de la delantera blaugrana es el argentino. El mismo Tata Martino lo ha entendido, y su frase de “si no se llegan a entender Messi y Neymar, la culpa es del entrenador”, enmarca una realidad incuestionable.
La meta mínima que deberá alcanzar Neymar, en teoría, es de unos 15 goles en la Liga Española, cinco en Champions y algunos más repartidos entre la Copa del Rey y otras exhibiciones. Llegó con talante de estrella, y deberá confirmarlo sin una demora más larga que la siguiente temporada.
Su estilo encaja en el Barcelona. Dista mucho de otros delanteros que han fracasado en el juego catalán por poseer características más estáticas, como es el caso de Zlatan Ibrahimovic. Probablemente esa sea la clave para que termine triunfando en el Barsa lo que otros no pudieron.