Nacho Peralta: Plan Estatal de Desarrollo 2016-2021
Por: Rogelio Guedea
Hace unos días fue presentado, por parte del Ejecutivo estatal Nacho Peralta, el Plan Estatal de Desarrollo (PED) 2016-2021, teniendo como base principal del mismo los dos rubros que más han deteriorado el tejido social colimense en la actualidad: la inseguridad y la pobreza. Como el PED no puede redactarse con una percepción apocalíptica, es natural que todas las proyecciones del mismo hayan sido alentadoras, tal como lo son las interpretaciones que han emitido al día de hoy los medios de comunicación aliados al gobierno de Nacho Peralta. La realidad, sin embargo, es otra. Si bien se han dado avances significativos en las finanzas estatales (yo pondría, como el más significativo de ellos, el pago al adeudo histórico con nuestra máxima casa de estudios), en materia de seguridad y de liderazgo por parte del gobernador Nacho Peralta seguimos masticando piedras. Con respecto a la recrudecida inseguridad, el número de crímenes violentos que suceden a diario siguen poniendo a Colima en el primer lugar a nivel nacional. Pero no sólo eso: los robos a casas habitación, a bienes muebles (principalmente vehículos) y a personas se han desatado de una forma desorbitada, a tal grado que la población vive literalmente aterrorizada. Ya son varios los videos que circulan en redes sociales en donde uno puede apreciar cómo inofensivos transeúntes son robados de manera violenta. No menos hace unos días se introdujeron unos sujetos a la iglesia del Espíritu Santo para arrebatarle su bolso, con todo lujo de intimidación, a una anciana. De más está aludir los días negros que hemos padecido en los últimos meses, los cuales nos han dejado saldos de hasta cinco muertos en un solo día. Lamentablemente, los columnistas y los medios de comunicación aliados al gobierno del Estado (Diario de Colima, el principal) no hacen sino justificar esta violencia con dos argumentos de suyo insostenibles: que fue generada y es culpa de las administraciones de Silverio Cavazos y Mario Anguiano (curiosamente las administraciones enemigas al grupo del gobernador Nacho Peralta, fernandistas incluidos) y, además, que seis meses son todavía poco tiempo para dar resultados. Esta defensa no la hace, por ejemplo, un Diario de Colima con respecto a las alcaldías o a los legisladores albiazules, a quienes sí les exige resultados inmediatos y no les aplica la consideración del poco tiempo que llevan gobernando o legislando. Tan claro es el interés de confundir a la población, que se ha querido hacerle creer a la misma que el asunto del aumento salarial de los diputados locales es más gravoso que las muertes, los robos y la violencia en general que nos tunde todos los días, sin agregar los pocos o nulos resultados que han dado muchos miembros del gabinete nachoperaltista. No estoy diciendo que justifico el aumento salarial de los diputados (nunca estuve de acuerdo con él, ni lo estaré), sólo digo que se le ha puesto como una gran cortina de humo para esconder la problemática principal por la que atraviesa nuestra entidad en este momento: la inseguridad (que empieza a ser un acicate para el Procurador y el grupo de seguridad estatal) y la falta de credibilidad de un gobernador que, blindado de toda exigencia social, no ha logrado convencer a la ciudadanía de no ser más de lo mismo, sobre todo por la cercanía que sigue teniendo con personajes políticos corruptos. El Plan Estatal de Desarrollo puede ser, pues, el verdadero arranque de una transformación social y política en nuestra entidad o, por el contrario, puede también ser más de lo mismo. Ya veremos.
@rogelioguedea