INTERACCIÓN SOCIAL
Por: Florencio Llamas Acosta
De la jornada electoral del 1 de julio del 2012 a la fecha han trascurrido ya 17 meses y faltan 18 meses más para que el 5 de julio del 2015 los colimenses volvamos a tener otra elección tanto para gobernador, diputados federales, alcaldes y diputados locales. Aunque parece que falta mucho, el tiempo no se detiene y pronto empezaran las campañas, por lo pronto algunos analistas y medios de comunicación han empezado a presentar listas de aspirantes a los diferentes cargos de elección popular.
En el periodo que ha trascurrido, algunos partidos políticos locales han aprovechado el tiempo para ajustar sus estructuras partidistas, renovar y capacitar a sus cuadros políticos y así enfrentar con mayores probabilidades de triunfo las próximas votaciones.
De igual forma, los actores políticos de los diversos partidos, con aspiraciones a cargos de elección popular, realizan acciones y actividades tendientes a promocionarse e irse posicionando en el ánimo de los electores, no es casual que el gobernador Mario Anguiano haya declarado hace unos días que no es tiempo de distraerse de sus responsabilidades buscando nuevos cargos, pero tampoco es fortuito ver a los diputados, alcaldes, funcionarios estatales reunidos con personas y organizaciones conviviendo en los restaurantes como sucede ahora en la feria, o en cualquier época, teniendo vistas y reuniones de diversa índole y difundiéndolo y socializándolos a través de las redes sociales.
De ahí que vale la pena preguntarse, ¿qué tanto esta intensa interacción personal que se hace comunicable, influye en el ánimo de los electores? De acuerdo Zuckerman (1998), las preferencias políticas están sujetas a patrones de interacción y a los contextos sociales en que habitan los votantes. En este sentido, el votante además de compartir un mismo entorno geográfico y circunstancias comunes con los vecinos con los que interactúan, el contexto social le provee de información simplificada, respecto de los partidos, del gobierno o de actores políticos, por lo tanto, si influye la interacción del actor político y la difusión de las mismas, en las simpatías o antipatías que pueda tener un elector hacia su persona y aspiración.
Es decir, la interacción personal del actor político y aspirante con los ciudadanos implica un intercambio de información que tiene como efecto, (si es adecuadamente utilizada) de generar influencia política y persuasión en el futuro votante.
De esta forma, el actor político que logre generar amplio espectro de interacción personal con los ciudadanos y logre consolidar una imagen positiva de su persona, mediante un estratégico esquema de comunicación política, podrá con mayor facilidad alcanzar influir en el ánimo de los electores y obtener el triunfo en el próximo proceso electoral, así que si algún ciudadano tiene aspiraciones políticas y está en su casa descansando o algún actor político no se ha puesto las pilas, no dejen pasar más tiempo, porque de acuerdo a la teoría y a los expertos las interacciones y redes sociales, sí influyen en la orientación del voto de los ciudadanos, tal cual lo expresa el dicho popular, “Santo que no es visto, Santo que no es venerado…” ¿O usted cómo lo piensa?
*Maestro en Ciencia Política y Administración Pública. Catedrático de la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad de Colima.
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