Una vez en el lugar, el representante social ordenó el acordonamiento del área, así como el levantamiento de las primeras evidencias, así como el traslado del cuerpo al Servicio Médico Forense, para que le fuera practicada la necropsia de ley.
Las primeras investigaciones se desprende que una persona de sexo masculino alrededor de las cinco de la mañana con veinticinco minutos, salió de su casa para llevar sus bolsas de basura al lugar de costumbre, pero que había caminado algunos pasos cuando observó en la banqueta un envoltorio.
Señaló que se acercó notando que era una cobija en cuyo interior había algo, por lo que procedió abrirla, percatándose que se trataba de un bebé de sexo masculino, por lo que de inmediato llamó a la PEP, quienes minutos después llegaron al igual que la ambulancia de la Cruz Roja, manifestando los paramédicos que el niño ya había fallecido.
Conforme a los resultados de la necropsia, el bebé tenía entre 7 a 8 meses de gestación, además presentaba aún el cordón umbilical, lo que significa que tenía pocas horas de haber nacido, y la muerte fue a consecuencia de un traumatismo craneoencefálico.
El Ministerio Público continúa con las investigaciones para localizar a la mamá del bebé, para el esclarecimiento de los hechos.
El Gobierno del Estado a través de la Procuraduría General de Justicia, continuará trabajando todos los días para lograr capturar a quienes en el pasado o presente han cometido hechos delictivos que vulneren los valores fundamentales de las sociedad en que vivimos, con ello damos muestra de que en Colima, no habrá impunidad.
Se hace un llamado a la población en general para que denuncie de manera anónima hechos delictivos a la PGJ a los teléfonos gratuitos; 01-800-581-1770, 01-800-506-8360, así como al 01-800-830-6415, de atención a víctimas y prevención del delito.