¡Hablando Claro!

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Por: Ramón Pérez Gutiérrez.

Las intensas lluvias que azotaron al estado de Colima el pasado 10 de octubre dejaron innumerables daños en infraestructura y viviendas, desde este espacio manifiesto mi solidaridad con las personas que sufrieron daños. Mi reconocimiento a las autoridades por su pronta respuesta en especial a la Presidenta Municipal Margarita Moreno

Abstencionismo.

El abstencionismo es un tema recurrente, la ciudadanía renuncia a su derecho a ejercer el voto como consecuencia del bajo cumplimiento de los gobiernos, la casi inexistente creación de políticas públicas, la falta de transparencia y la pobre vinculación con la sociedad. Generan el abstencionismo como, una forma de reflejar el descontento de los ciudadanos, con una tendencia más alta en los grupos más jóvenes.

Desilusión, indiferencia, hartazgo, son algunas de las razones que han fortalecido al abstencionismo como una forma de cuestionar a los gobiernos, a los candidatos y a los partidos políticos

Para qué voto, no creo en la política, ningún candidato me representa, no hay suficiente información, son algunas de las excusas que manifiestan y que contribuyen al abstencionismo que es uno de los problemas que enfrenta la democracia.

La consecuencia de no votar es que se debilita la ciudadanía y obstruye el desarrollo de la democracia, además polariza el resultado de las elecciones, ya que estas se definen con el voto de una minoría.

Otra de las consecuencias del abstencionismo, son la radicalización de los regímenes, que con un profundo sentido populista se centran más en el marketing político, vendiendo imagen y no propuestas ni proyectos.

Existe una baja participación en los procesos electorales debido a que no existe una articulación entre las personas y las instituciones, por otra parte, cada vez hay más apatía y desvinculación de las personas con estructuras sociales.

Partiendo de esa lógica, el rival a vencer no son partidos políticos, es el abstencionismo que ha sido ganador en los últimos procesos electorales.

México encabeza la lista de los países con mayor abstencionismo, con cuatro de cada diez ciudadanos participando en las elecciones, es decir casi el 50%, una cifra preocupante.

Participar en las elecciones es un acto de responsabilidad ciudadana para construir un mejor país.

En los resultados de una elección en donde existe un alto índice de abstencionismo, no se ve reflejada la voluntad de la ciudadanía, se debilita la representatividad de las personas que gobernarán, y genera desconfianza hacia el gobierno repercutiendo en la gobernabilidad.

Cuando gran parte de la población decide no participar, existe el riesgo de que la opinión de otras fuerzas o grupos no sean escuchadas o atendidas. Lo cual nos lleva a la generación de políticas públicas que no reflejan las necesidades y los intereses de todos los ciudadanos, debilitando así la calidad de la democracia y la inclusión social.

Para finalizar es importante que como ciudadanos participemos de manera decidida y promovamos una educación cívica que genere transparencia en los procesos electorales. Hagamos un esfuerzo como sociedad para generar una mayor participación ciudadana y fortalecer nuestra democracia.

*Las opiniones expresadas en este texto de opinión, son responsabilidad exclusiva del autor y no son atribuibles CN COLIMANOTICIAS.