GOLPES DE ESTADO EN AMÉRICA LATINA

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Por: Manuel Olvera Sánchez

La búsqueda del poder en un país resulta ser algo tan complejo que independientemente de existir en cada nación instituciones encargadas de hacer valer la voluntad ciudadana, en algunos casos eso no es suficiente cuando los intereses personales o grupales  se anteponen a los intereses de la sociedad. La democracia tan anhelada por muchos años en los países de América Latina,  si bien es cierto se habían logrado avances significativos, también es cierto que los intereses externos pisotean la voluntad del pueblo.

Hablar de golpes de estado en América Latina era algo que se pensaba que pasaría a ser parte de la historia, lo anterior derivado a las corrientes de pensamiento que surgieron durante los años ochenta, corrientes que buscaban consolidar la democracia independientemente de que fuera de calidad o  no, se buscaba legitimar a los gobiernos a través de la participación de la ciudadanía.

Lo anterior, visualizaba un escenario favorable para los países del continente americano en temas económicos, de salud, vivienda, seguridad social, alimentación, sin embargo, países como Venezuela, Haití, Bolivia, Ecuador, Paraguay y Brasil sufrieron el impacto de un golpe de estado con las consecuencias desfavorables que este tipo de eventos representa para cualquier país.

Como cualquier actividad, los golpes de estado han evolucionado en la forma de llevarse a cabo, refiriéndonos a golpes de estado consumados en el siglo veinte, observaremos que en la mayoría de los casos fueron llevados a cabo por sus respectivos ejércitos y con el apoyo de los Estados Unidos de América.

Este fenómeno de los golpes de estado pareciera ser que se resiste a morir y un testimonio son la cantidad de ellos presentados en el siglo veintiuno,  tal es el caso de países como Venezuela, Haití, Brasil, Paraguay, Bolivia, Honduras y Ecuador, naciones que a partir del año 2001 y a la fecha los  han sufrido, sin embargo en algunos casos como el de Venezuela y Ecuador fracasaron.

Vale recordar que en el siglo veintiuno en los países de Haití, Bolivia y Honduras ha estado presente la intervención del gobierno norteamericano; en el caso de Haití el presidente fue detenido y deportado por el ejército de los Estados Unidos de América, y en el de Honduras existen testimonios suficientes que dan fe de cuál ha sido el proceder del gobierno norteamericano. En algunos casos los golpes de estado han sido impulsados y llevados a cabo por sus respectivos parlamentos,  tal es el caso de Brasil y Paraguay.

Vale recordar que México ha sido una nación impulsora de otorgar asilo político a quienes a su juicio lo requieran, tal es el caso de León Trotsky, un fuerte impulsor de la revolución rusa y que obtuvo su asilo político por el entonces presidente Lázaro Cárdenas. Rigoberta Menchu una incansable defensora de los indígenas y premio nobel de la paz en el año de 1992 solicito asilo político al ser atacada su familia. Héctor José Cámpora presidente de Argentina también gozó de asilo político en nuestro país. En el mandato del presidente López Portillo el último Shah de Irán solicitó asilo político una vez pasada la revolución islámica. En el año de 1875 José Martí fue castigado por el gobierno de España al apoyar la independencia de Cuba, su asilo duró aproximadamente un año. Durante el gobierno de Felipe Calderón se le otorgó asilo político a Manuel Zelaya, presidente de Honduras. Y recientemente el presidente Andrés Manuel López Obrador brindó la protección al presidente de Bolivia Evo Morales.

Todo parece indicar que quienes se acogen a las prerrogativas que brinda el asilo político fueran malos gobernantes y recurren a esta figura para salvaguardar su vida, sin embargo en el caso particular de Evo Morales quien no cuenta con una carrera universitaria, fue pastor de llamas, antes de incursionar en la política se dedicó a entrenar jóvenes en la disciplina del futbol.

Evo Morales fue presidente de en un país donde el 65% de la población boliviana vivía en la pobreza logrando reducirla a tan solo un 35%, situación que permitió lograr una calidad de vida digna en uno de los países más pobres del continente americano; lo anterior da testimonio las cifras del Banco Mundial.

Tan solo en su gobierno el producto interno bruto aumento en un 2.6 %, incluso el Fondo Monetario Internacional calificó a la economía de Bolivia como la de mayor crecimiento en Sudamérica, lo cual le permitió la generación de empleos de manera considerable y le permitió  bajar de 8.1 a 4.2 el desempleo.

Una de las fortalezas de la economía lograda durante el gobierno de Evo Morales fue estabilizar su moneda, la recibió a 8 pesos por dólar, la deja en 6.95 pesos por dólar, lo anterior derivó en un consumo interno, con riqueza propia y estar preparada ante cualquier shock económico que ponga en riesgo su economía.

En lo referente a áreas como la salud, educación, deporte e infraestructura carretera, tan solo en su mandato se ejecutaron aproximadamente 8,800 obras lo cual detono la economía interna.

No obstante que en las pasadas elecciones desarrolladas en Bolivia los resultados electorales le dan 10 puntos porcentuales a Evo Morales por encima de su más cercano competidor Carlos Mesa, para la Organización de las Naciones Unidas y otros organismos internacionales las elecciones tuvieron un tinte fraudulento derivando en la renuncia de Evo Morales.

La visión que tenías sobre mí, no la defraudare, eso me fortalece aún más, serás ese impulso para lograrlo.

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