Por: Francisco Pérez Medina
El subsecretario de salud, Dr. Hugo López Gattel, responsable de atender, personalmente, la contingencia de salud, inició durante el primer cuatrimestre del año con una enorme credibilidad por su estilo de comunicar, con facilidad de palabra, postura con firmeza, gesticulación cuidada y mesurada, vestimenta formal y casual pulcra, brindando tranquilidad y seguridad en sus afirmaciones, atributos que proyectaban, complementariamente, con su formación académica y científica; En abril alcanzó su máximo histórico de un, nada despreciable, 59.3% de aprobación (30-04-2020, Mitofsky) superando al propio presidente en esa medición, pues éste se encontraba justo en su más baja aprobación en lo que lleva de su administración con 45.2 % (30-04-2020, Mitofsky).
¿Qué sucedió desde entonces que le ha llevado a dilapidar esa aprobación? Existen diversas razones que han ocasionado un deterioro enorme en su credibilidad y aprobación, al grado de tener que salir el propio presidente en dos ocasiones para realizar porras y arengas públicamente desde Palacio Nacional para defenderlo “¡no estás solo!, ¡no estás solo!” (04-05-2020, El Imparcial) o la más reciente “¡Hugo, aguanta el pueblo se levanta!” (15-07-2020, La Razón), en la que posteriormente la cámara hace un paneo hacia el aludido emitiendo una sonrisa, que antes parecía simpática, ahora, más bien transmite impudor y cinismo.
Las razones que explican la avería, no se debe a la oposición, tampoco atribuibles a los ciudadanos, ni siquiera a los medios de comunicación, más bien las causas se originan en sus propias palabras https://www.colimanoticias.com/las-mentiras-de-lopez-gatell/, sus propias estimaciones, predicciones, modelos, registros, recomendaciones, declaraciones en entrevistas, sobre todo las internacionales y, en lugar de continuar con su cualidad de rigor académico, contagiarse del estilo del presidente: echar culpas evitando hacerse responsable de su desastre.
Primero culpó a los medios de comunicación, luego al neoliberalismo, al pasado, a la obesidad, a la industria refresquera y comida chatarra, a la población por no alimentarse bien ni hacer ejercicio, pero asumir una autocrítica sobre su desempeño, jamás. Eso implicaría aceptar que se equivocaron. Lo malo de no tener un pequeño grado de humildad, menos, rigor académico, pues espera obtener distintos resultados haciendo lo mismo. Todo lo anterior, podría excusarse si se tratara de cosas o materiales, el problema aquí es que se trata de vidas, mismas que se han perdido precisamente por actuar con un rigor político, no así académico. De 6 mil hasta un máximo de 8 mil muertes que estimó ocurrirían (22-04-2020, SDPnoticias) esta semana, según cifras oficiales, son ya 40,400 y la cifra aumentará, llevando a nuestro país al nada honroso 4to lugar mundial en muertes por Covid 19.
Así, estimado lector, no hay esperanza de que modifiquen su estrategia ni acepten responsabilidad alguna, mejor, cuídese usted mismo y cuide de los suyos, utilizando el cubrebocas, limpiando correctamente y de manera frecuente sus manos, mismas que no debe llevarse al rostro, no acuda a lugares concurridos y salga, lo indispensable, para la subsistencia.
Salida
1.- Vino la semana pasada el presidente a nuestra entidad y la decisión más trascendente que informó es que la marina y el ejército tomarán el control de puertos y aduanas, respectivamente. ¿Por qué la misma estrategia de los gobiernos que le precedieron y que tanto criticó?
2.- Finalmente se consumó el cambio de vientos en el congreso. Creo que nadie hubiera predicho, al inicio de la legislatura, que la mayoría concluirían siendo minoría. Por eso el viejo adagio en ciencia política de que “dos más dos, puede resultar cinco”.
3.- Entramos a la fase 3 esta semana en nuestro estado, todo parece indicar que, el regreso a clase de manera presencial, no será en la fecha prevista.