Con este preámbulo, quiero comentar con el lector una reciente estimación que hizo el Colegio de México en coordinación con la UNAM y la Universidad Autónoma Metropolitana, y que se aplicó entre el 30 de mayo y el 6 de junio en 600 distritos electorales a 3 mil 480 personas. El diseño y la selección de la muestra así como la elaboración de la base de datos corrieron a cargo de la empresa Berúmen, mientras que las tres instituciones elaboraron el cuestionario e interpretaron los datos.
El resultado de este ejercicio revela lo que ya muchos han dicho, incluso en el equipo del puntero, que la elección será entre Quique Peña y Andrés Manolo López (aunque el chaparrito pelón de lentes insista en los pinoles que es entre tres). Con base en señalamientos de académicos de estas instituciones, hay un “empate técnico” entre estos candidatos presidenciales.
De acuerdo con las cifras dadas a conocer, el priísta tiene un margen de preferencia de entre 30.9 y 35.9 por ciento y el aspirante del Movimiento Progresista de entre 22.8 y 31.8 por ciento.
Los resultados que, insisto, deben verse con una óptica más académica que política, aunque a algunos les duela, indican que la panista Josefina Vázquez Mota queda abajo con un puntaje de entre 15.3 y 20.7 por ciento. El estudio también concluye que 27 por ciento nunca votaría por Vázquez fumas, 25 por ciento no lo haría jamás por Peña, 21.1 por ciento por López y 13.4 por ciento por el candidato Gabriel “cuadro” de Gordillo.
También destaca de manera súper importante que la tasa de rechazo a responder fue de 40 por ciento y los indecisos representan cerca de 20 por ciento. (Los indecisos, el verdadero problema y salida fácil de muchas encuestas para dar sus cifras a medida del cliente, y que son los que realmente pueden mover el resultado de la elección).
En la presentación de este trabajo se explicó que por lo general las encuestadoras muestran los resultados como si fueran carreras de caballos (y no precisamente los del chiste de polo polo) y por eso los académicos quisieron romper esa lógica, mostrando rangos de confianza a partir de datos que existen en la encuesta, con la probabilidad de 95 por ciento de darse esta intención de voto.
Si bien se trata de un trabajo académico instrumentado por tres de las principales instituciones educativas y de investigación del país, como ya señalé, no podemos dejar de señalar la coyuntura política en que se da, que se quiera o no impacta de alguna forma en el escenario previo a la jornada electoral. Yo como dijo el sereno, y a estas alturas del partido, mejor me espero a los resultados del PREP y luego a los oficiales que van a ser los que verdaderamente cuenten, siempre y cuando los “anónimos” no hagan travesuras.
FINAL.- Se comenta por allí que el candidato del PAN en la tierra de los sopitos se cuida mucho de que la gente se entere de que es el marido de la respetable dama de Manzanillo, por aquello de las recochinas dudas.
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