“Hice mi pelea. Venía preparado para dar lo mejor. Ahora estoy listo para los máximos retos. Estar en mi primer estelar me motivó mucho para buscar dar lo mejor de mí y brindarme a este público”, comentó Álvarez, al término de la pelea.
El Canelo (41-0-1, 30 KO) encontró la clave de su victoria con golpes a la zona blanda de su retador estadounidense, quien tuvo destellos de buenas combinaciones. Sin embargo, al final se impuso la diferencia de pesos, pues, por cada cuero tirado por López, el tapatío demolía más con sus ganchos al hígado. Un superligero que sucumbió en su intento por ser superwelter.
Las 14 mil personas que se dieron cita en la arena de Las Vegas se entregaron por completo con gritos de “Canelo, Canelo”, en lo que fue la primera estelar para el tapatío desde el MGM Grand.
Así, el mexicano logró su quinta defensa exitosa como campeón mundial del Consejo Mundial de Boxeo.
En el primer round, Josesito López parecía mostrar potencia en sus golpes, pese a haber subido de categoría, y aguantó a Álvarez con sus castigos de poder, con el mensaje de estallar en cualquier momento.
Para el segundo asalto, Saúl Álvarez mandó a la lona a Josesito, con unos ganchos al cuerpo, cuando ya lo tenía acorralado contra las cuerdas. El tapatío mostró una recuperación inmediata, pues al inicio de ese mismo asalto había recibido golpes peligrosos por parte del retador, que generaron gritos de preocupación entre el público.
Saúl rozó el nocaut a favor, cuando tuvo arrinconado al estadounidense, tras haberlo mandado a la lona por segunda ocasión. No obstante, Josesito soportó los siguientes segundos para llegar a escuchar la campana y tener su minuto de descanso.
En el cuarto asalto, por tercera ocasión cayó a la lona Josesito López. Tuvo su mejor momento con unos intercambios de golpes constantes que hicieron vibrar el rostro de Saúl, pero éste respondió con ataques a la zona blanda que terminaron por volver a mandar a la lona al mexicano-estadounidense.
Pero la potencia de un superwelter natural terminó por imponerse en el quinto asalto. Saúl lanzó sus últimos cruzados al rostro de López, quien ya no pudo sostener la guardia, por lo que el réferi Joe Cortez decidió frenar el castigo, cuando sonaban las campanadas que marcaron el final del quinto.
El Canelo tuvo un gran festejo del Día de la Independencia, como estelar y nombrado como el Rey del Nocaut por los medios de comunicación estadounidenses, que lo reconocieron como el mejor noqueador de la noche.
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