Ruta de la Salud en Villa de Álvarez; ¿pertinente?
Por: Luis Ávila Aguilar
El domingo anterior, en la carretera Cómala-Villa de Álvarez, a la altura de la caseta de policía instalada en el cruce con la salida a Linda Vista y este tramo carretero, fue arrollada en forma por demás homicida y dolosa la agente de seguridad vial auxiliar del Ayuntamiento Carla Judith Larios Rodríguez en cumplimiento del ejercicio de su trabajo, contaba con apenas 24 años de edad.
La hoy víctima ordenaba el tráfico vehicular ya que este como todos los domingos, derivado de la conocida “ruta de la salud”, se cierra en uno de sus carriles principales, para más claro, el correspondiente al que conduce a Villa de Álvarez-Comala, y que en esta altura del semáforo genera una intercepción, por lo que es necesaria la presencia de agentes para dar orden y seguridad a la vialidad y los paseantes.
El hecho es lamentable, por que que deja como saldo una pérdida de vida humana, mujer joven que en cumplimiento de su deber fue arrollada arteramente por quien aún se desconoce (se tienen las características del automóvil) y quien seguramente por ser domingo por la mañana no se encontraba en pleno uso de sus facultades, amanecido, sin dormir y expuesto a los influjos del alcohol si no es que también de droga, no puede ser otra la explicación.
Es un hecho que debe llama la atención de la sociedad y en particular de las autoridades municipales para que vean la pertinencia de este programa, que si bien tiene un sentido original positivo, a estas alturas, dadas las condiciones actuales de inseguridad, puede representar un alto riesgo para los usuarios de esta vía de comunicación.
En esta ocasión fue una trabajadora municipal, pero imaginemos que estuviera pasando si las victimas fueran familias que transitan cada domingo en esta ruta que comprende los municipios de Villa de Álvarez-Comala por sobre esta carretera que los comunica.
Es que la ruta denominada de la salud, (hoy resulto de muerte) cumplió su ciclo, fue diseñada en tiempos cuando Villa de Álvarez no contaba con los espacios adecuados para la ejercitación dominical y con el fin de proporcionarles a la familia un espacio de recreación y la práctica saludable de la caminata.
Hoy en día, Villa de Álvarez cuenta con espacios dignos y adecuados para el ejercicio en familia, como la pista de tartán de la Unidad Deportiva Gilberto Gil Cabrera, la Unidad Deportiva Sur, la Gustavo Vázquez Montes al norte de la ciudad en la colonia Solidaridad y jardines como la del propio centro de la cabecera municipal y de Villa de Izcalli en donde las familias pudieran con toda seguridad realizar sus prácticas dominicales.
Aunado a lo anterior la famosa “ruta de la salud” ocasiona como contraparte gastos que considero innecesarios, tal como se lo plantee al presidente municipal interino mi amigo Nacho Zambada, de policías y tránsito para regular el tráfico, la gasolina de los vehículos que esto implica, la ocupación de los promotores de salud, agua para beber de los paseantes, y la molestia vial que ocasiona el desvío y la limitación de un solo carril por la carretera.
No vale la pena pues, a mi consideración, continuar con este programa que fue en un principio noble, pero que hoy en día dado el incremento de la inconsciencia social como la ocurrida el domingo, pone en riesgo la tranquilidad familiar de los paseantes, porque si fue hoy un elemento de seguridad vial quien nos garantiza que mañana, no sea una familia entera, para eso están las canchas deportivas y Villa de Álvarez cuenta ya con las necesarias.