EMPÉDOCLES
Por: Édgar Rodríguez H.
El panista ex diputado local y alcalde de Colima, Héctor Insúa García, tiene un grave problema con la ingesta de bebidas alcohólicas, con su forma de beber dirían en AA. El político y hombre público que llegó de la Perla Tapatía para conquistar la capital colimota siempre presto está para decir ¡salud! Y que traigan las otras. Una vez que se ha tomado los primeros tragos no para hasta, en el mejor de los casos, quedarse dormido donde se le cansa el caballo. Por supuesto que nadie se asusta ni se espanta de que el angelito sea un adorador consuetudinario del Dios Baco, pero es necesario advertirle a la ciudadanía para que esté atenta y se proteja ante cualquier previsible desaguisado de su alcalde. Sobre aviso no hay engaño.
A punto de arrancar su campaña electoral que lo llevó finalmente a la alcaldía capitalina al ganarle la partida por unos 112 votos de ventaja al priista Óscar Valdovinos Anguiano, el tapatío fue sacado de cantarito del Megapalenque de Villa de Álvarez, hecho del cual no faltó quien subiera a las redes sociales el video de tan vergonzoso cuan denigrante comportamiento. Sin embargo, extrañamente, el numerito no fue capitalizado por sus adversarios el mencionado OVA y la verde ecologista Esmeralda Cárdenas Sánchez, que se pasaron de limpios en la contienda electoral Lo que seguramente les agradecerá por siempre Insúa García.
Apenas el domingo anterior, justo cuatro días antes de que tomara posesión de su nuevo cargo para hacer de Colima una ciudad de primer mundo, al filo de las 20:30 horas, el personaje de marras llegó conduciendo su camioneta de la que se bajó cayéndose de mareado para ingresar a la tienda de conveniencia Kiosco ubicada en el cruce de la Avenida V. Carranza y calle Diamantes, zona norte, a donde entró a realizar algunas compras pero se quedó dormido unos 20 minutos sobre el mostrador de las cajas registradoras. Al despertar de su siesta etílica, Héctor abordó su camioneta con la intención de retirarse del lugar, lo que no pudo lograr por total falta de coordinación, quedándose plácidamente dormido quizá en espera de que lo recogiera el famoso hombre de la carretilla. Todo el numerito fue registrado por las cámaras de video del negocio cuyos propietarios lo borraron para protegerlo dado los intereses que hay de por medio entre los marineros y la autoridad municipal.
Nadie en su entorno familiar o círculo de amigos se ocupa de pastorear a su alcalde que mucho se expone al conducir un vehículo en estado de ebriedad, mucho menos sus agentes de tránsito, a pesar de que de él dependen tanto laboralmente como en la realización de los usuales negocios entre la autoridad municipal y los ‘empresarios’ afines, así declare que no le debe nada a nadie, y que por lo mismo no tiene compromisos con nadie, incluido su partido. Lo menos que su equipo, -si lo tiene- debiera hacer para prevenir un accidente de fatales e irreversibles consecuencias, es imponerle un chofer designado para que ingiera sin sobresaltos.
Nada personal en contra del alcalde tapatío de Colima, sólo el libre ejercicio de la crítica periodística a todo lo que incida negativamente en su desempeño del cargo para el que fue contratado por la mayoría simple de los electores que concurrieron a las urnas del primer domingo de junio de 2015. Tampoco hay de parte del columnista desgarramiento de vestiduras ni exclamaciones de sorpresa por la desmedida afición al alcohol de quien de alguna manera incidirá en la calidad de vida de la ciudad los próximos tres años que el multicitado pretende desde ahora extender a seis al reelegirse en 2018.
Más que sabido es que la primera condición para resolver un problema es reconocerlo en toda su dimensión e implicaciones. Allá Héctor Insúa García y los suyos si se aplican en serio y a fondo a dar el paso necesario. En tanto, ojalá que al menos no se vayan en contra del mensajero.
Se dice que…
*No es con amenazas, presiones y berrinches como el candidato perdedor del PAN de la contienda a gobernador, Jorge Luis Preciado Rodríguez logrará arrebatar algo que los ciudadanos decidieron en las urnas el pasado 7 de junio a favor de del priista José Ignacio Peralta Sánchez, haya sido por la diferencia que haya sido, pero ratificada en el conteo de voto por voto.
*El senador panista es víctima de sus propias mentiras y se queja de lo que él mismo genera con sus declaraciones que ya no cuajan en la gente de Colima y esto lo obliga a vociferar fuera y dentro del estado y a poner en duda las decisiones emanadas de la Sala de Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, en este caso el anteproyecto hecho del conocimiento público a través del cual se confirma que Preciado Rodríguez, de nueva cuenta mintió para llevar a cabo la impugnación ante el Tribunal Electoral, órgano que en los próximos días, sin duda, estará ratificando el Triunfo de Nacho Peralta.