2 DE JUNIO, DÍA INTERNACIONAL DE LAS PROSTITUTAS (SEXOSERVIDORAS)
Por: Edgard Saúl Díaz Aguirre
La prostitución en México: un fenómeno que moral y políticamente nadie quiere o se han negado ver, tanto la clase gobernante, como algunos grupos conservadores que han satanizado el tema. Es pertinente señalar que desde hace aproximadamente cuatro décadas específicamente desde el dos de junio de 1975 es celebrado a nivel internacional el día de la prostituta hoy denominada trabajadora sexual o sexo servidora.
En el último censo del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática se reveló que existían entre 160 mil y 986 mil trabajadoras sexuales en el país, ya hace más de cinco años desde el último censo y es seguro asumir que el número de personas involucradas en la prestación de servicios sexuales se ha incrementado desde entonces.
La prostitución es un fenómeno que existe en México que ha sido tolerado por las autoridades del estado Mexicano, ignorado y olvidado tristemente por la población, asumiendo una actitud de discriminación ante una realidad que lo quieran o no ha servido de desfogue para unos y de generación de empleos por otros y satanizado por algunos grupos sobre todo de carácter conservador, que por cierto muchos de sus integrantes han hecho uso de los servicios de sexo servidoras y que lo han ocultado en las más negras penumbras del anonimato.
La prostitución o sexo servicio es considerado como el acuerdo que existe entre dos personas, independientemente de su género o preferencias sexuales, con la finalidad de llevar a cabo el acto sexual o coito en donde no se encuentra contemplado los valores afectivos , sentimentales , de fidelidad o lealtad , a cambio de una cantidad determinada de dinero. La palabra, per se, prostitución involucra la exposición pública, el abandono, la deshonra, el corromperse por dinero, con el riesgo latente a ser discriminadas, excluidas y con un riesgo latente a ser víctimas de delitos sobre todo relacionados con su actividad sexual.
La psicología define a la acción de prostituirse como un abandono del ego y un acercamiento al autocastigo, es la supresión del sujeto y su facultad de elegir en función del cobro de una cuota. Sin embargo, existen distintas actividades económicas que causan insatisfacción a quien las realiza, comprometen sus valores, su confort e involucran la negación del ego al igual que la prostitución sólo que les denominamos: trabajo.
La prostitución en México existe, tolerada, por las autoridades que asumen que quienes la ejercen lo hacen en un esquema forzado, es por tanto un refugio para trabajadoras sexuales que representa aproximadamente el 40% de todas las trabajadoras sexuales en activo. Si bien existen supuestos legales que castigan la trata de personas y el lenocinio , la prostitución específicamente no es una conducta sancionada, ni un delito propiamente, es considerada, desgraciadamente, como una actividad que tiene relación con la drogadicción, alcoholismo, disfunción familiar, hasta como una actividad sucia, que denigra al ser humano.
Es menester que en nuestro país este entre los primeros lugares a nivel internacional en comercio sexual es un tema cultural y económico. Es cultural porque ya sea manejado con discreción o no, está presente en la realidad de un gran número de hombres y mujeres en México nadie sabe con certeza cuantas personas procuran los servicios de los y las sexoservidoras en los distintos estados de la república, como nadie tiene certeza de cuantos(as) sexo servidores(as) existen realmente.
Se trata al mismo tiempo de un tema de carácter económico, ya que, así como existen personas que ejercen la prostitución forzadas por terceros, también existen personas que la ejercen como una actividad económica más. Al igual que con temas impopulares como el consumo de drogas, carentes de políticas públicas, la prostitución es una actividad económica que genera ingresos mismos que no son grabados por el estado cuyas autoridades, simplemente, han optado por voltear al otro lado y fingir que nada pasa.
A través de investigaciones realizadas en distintos países se ha iniciado el debate de los efectos “colaterales” que ha tenido el combate contra el tráfico de mujeres en los derechos de mujeres migrantes y trabajadoras sexuales.
En México todas las formas de organización del trabajo sexual que van más allá de una persona trabajando en solitario son consideradas trata o “explotación” de la prostitución, lo que se traduce en una prohibición tácita de organización en pro de los y las trabajadores sexuales. Recordemos que este es un tema de salud pública y no va a desaparecer sólo con cerrar los ojos y prohibirlo.
En diversas naciones se ha logrado organizar el comercio sexual de tal modo que es perfectamente lícito ofrecer servicios y procurarlos, se realiza una transacción en condiciones de seguridad para ambas partes y el estado se involucra para garantizar los temas de salud pública y recaudación de impuestos. No se trata de estar a favor o en contra, se trata de entender el fenómeno de la prostitución como parte de nuestra realidad y garantizar que su práctica no genere más víctimas.
A CHILE PELÓN LES DIGO: Que resultaría una severa violación a los derechos humanos de nuestras sexo servidoras y nuestros sexo servidores, que el estado no les proporcione las facilidades necesarias a efecto de que puedan acceder a mejores niveles de vida, derecho a la seguridad, a la salud, derecho a que les sea reconocido su trabajo como una vida honesta de vivir, a que no sean mancillados ni perseguidos tratándolos como si necesariamente fueran delincuentes o como personas non gratas. Sin lugar a dudas se deberá de legislar en ese sentido, protegiendo su dignidad y garantizándoles una vida incluyente en el devenir social que los rodea, recordemos que nuestros sexo servidores tanto hombres, como mujeres, nos proporcionan satisfacciones carnales que no se encuentran en otra parte, que de repente suelen convertirse en confidentes, amigos y hasta paño de lágrimas para quienes han sufrido un desamor, una traición y hasta una desilusión amorosa, nos entregan su piel, su tiempo, sus fingidos gemidos , sus lívidos intensos, y hasta nos toleran nuestros olores y nuestros sabores que no siempre son gratos, se inspiran para complacernos y al final de cuentas, y al termino de todo, se quedan solas, tristes y con un vacío enorme en su corazón, debemos de protegerlas y hasta entenderlas, pues si bien es cierto, que no es el sentimiento la que las une a nosotros, también es cierto que dejan algo de ello sin siquiera proponérselo .
Mi respeto y admiración a nuestras sexoservidoras, que gracias a ellas y a ellos, nos han dado un poco de placer, de felicidad y de amistad para complacernos. Muchas Felicidades hoy dos de Junio día Internacional de nuestras prostitutas (Sexoservidoras)
*Edgard Saúl Díaz Aguirre
ABOGADO POSTULANTE
SECRETARIO GENERAL INTERNACIONAL DE CONAPE
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