¿Opositor o seguidor?
Por: Francisco Jesús Pérez Medina
Aceptar sin cuestionar, realzar disciplinadamente las decisiones de un Gobierno, defenderle ciegamente, te convierte en un seguidor político; cuestionar, señalar errores, contrastar o pensar diferente te califican como opositor; ¿dónde queda el punto medio? Se posiciona como el ciudadano; ése que, a final de cuentas, somos todos. Decidir ser uno u otro, depende del libre albedrío; pero, pensar que estar con uno te convierte en enemigo, es, por lo menos, necedad.
Vemos en la agenda pública una continua batalla entre unos y otros, queriendo imponerse ante la visión del distinto, como si eso significara ganar una guerra; tener la razón para avasallar al adversario. No nos damos tiempo de escuchar, analizar, comprender o ser empático, nos cerramos a querer vencer e imponer la narrativa. Al final de esta batalla, con este comportamiento erróneo, sólo el político gobernante gana.
En apariencia es mejor estar con éste, del lado correcto, que con la minoría del lado incorrecto, que deberá ser borrado o aniquilado por su decisión de no sumarse, mientras el primero, podrá ser valorado y premiado por estar con el ganador.
¿Qué fue lo que pasó? ¿Por qué tanto encono? Es la resaca del proceso electoral 2018: familias, amistades, conocidos de pronto fragmentados y peleados de manera irreconciliable. ¿tiene sentido estar divididos? La respuesta es obvia: rotundamente, no.
Antes de ser opositor o seguidor, somos mexicanos, hermanos de sangre, debería terminar la pelea, pero, infortunadamente la historia se repite, una batalla constante que parece inacabable: el español vs el indígena, el criollo vs el español puro; el liberal vs el conservador, el republicano vs monárquico, el revolucionario vs el hacendado, y finalmente el mexicano vs el mexicano. Ejerzamos nuestro derecho a identificarnos con una u otra postura, sin que ello nos confronte irreconciliablemente con el prójimo. ¿Será posible? Todo apunta que no. Viene otro proceso electoral que, seguramente, incrementará esta inacabada batalla entre familias, conocidos y desconocidos. Ojalá la percepción sea equivocada, y se logre la armonía a pesar de nuestras diferencias, ¿es mucho pedir?.
Salida
Finalmente, en el transcurso de la semana hubo varios acontecimientos en la agenda pública local, nacional e internacional, que podemos catalogarlos aciertos:
El alcalde de Colima marcándole la agenda pública al gobernador del Estado; éste tendiendo puentes para salvar su salida; y el presidente, fomentando acercamientos con gobernadores de oposición (PRI); finalmente -aclaro, no es para México- pero, finalmente, es un acierto político del presidente de EE.UU destacando en su discurso “México, está, de hecho, pronto lo sabrán, pagando por el muro“.