PARACAÍDAS
Por: Rogelio Guedea.
Hace unos días la Universidad de Colima y el gobierno del Estado firmaron un acuerdo estratégico de apoyo mutuo para los temas relacionados con la protección civil, tan importantes para la prevención social en una entidad que ha sido a lo largo de la historia azotada por terremotos, huracanes y otras eventualidades de carácter antrópico. El acuerdo en sí mismo es plausible porque la Universidad de Colima cuenta con capital humano altamente capacitado para poder apoyar al gobierno del Estado en estas tareas pero, a su vez, el gobierno del Estado puede apoyar de manera recíproca a la Universidad de Colima a fin de que ésta cree las condiciones para que este personal capacitado siga avanzando en sus conocimientos y prácticas en este rubro. Por eso precisamente es una alianza estratégica. Más allá de los beneficios que este tipo de alianzas conllevan (la instrumentación del conocimiento en la práctica y ejercicio cotidiano en las problemáticas sociales), lo que yo ponderaría de este hecho es que me parece realmente un acierto del gobierno de Indira Vizcaíno que se haga apoyar de la máxima casa de estudios en éste y otros muchos rubros, a fin de hacer frente a las problemáticas del Estado desde una perspectiva que tenga como base el conocimiento científico y la experiencia de su práctica. He visto cómo en respuesta a esto, desde el arranque de su gestión el gobierno de Indira Vizcaíno respaldó a la máxima casa de estudios devolviéndole un presupuesto que históricamente se le había regateado, en señal de que para la mandataria estatal la UdeC es una institución a la que le vale ese respaldo de su gobierno, pues sabe (como lo dijo ella misma en el acuerdo de Protección Civil) que nuestra máxima casa de estudios ha hecho y puede seguir haciendo aportes importantes a la sociedad colimense, como ya lo está haciendo ya con algunos gobiernos municipales. Ha sido también un enorme acierto del rector Christian Torres Ortiz ver a la Universidad de Colima como un instrumento también de cambio social, esto es una institución que puede hacer aportes reales a las problemáticas más apremiantes de nuestra entidad. Yo, particularmente, soy una persona altamente pragmática, y por eso comparto esta misión actual universitaria, pues considero que si el conocimiento no nos sirve para cambiar de manera palpable el estado de cosas, entonces no nos está sirviendo para mucho. Espero, pues, que esta alianza estratégica entre el gobierno de Indira Vizcaíno y la Universidad de Colima continúe creciendo en todos los rubros clave de las problemáticas sociales, y que sea la solución de estas problemáticas la mejor recompensa para ambas partes. Estoy seguro que los colimenses lo agradecerán infinitamente.