TONALTEPETL

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Por: Gustavo L. Solórzano.

Manteca de cerdo, única y especial para cocinar los alimentos; cuando era niño mi madre me mandaba a la tienda para comprar cien gramos de manteca. Me la daban en un papel de envoltura, el reto era llegar rápido a casa, antes de que se derritiera con el calor de mi mano. El sabor de los frijoles fritos y de los guisos que mi madre preparaba, adquirían un sabor único con la grasa del puerquito.

Un mal día, los medios informativos como la tele, sembraron el miedo en la gente diciendo que la manteca podría traer consecuencias funestas para las personas. Que el colesterol y los triglicéridos se elevaban y que los infartos, etc. A cambio nos ofrecieron “lo mejor” de la naturaleza, el aceite comestible, “limpio, puro y sin mancha”. En consecuencia, la manteca fue repudiada y las empresas aceiteras hicieron su agosto con la fe crédula de la gente, nacida del desconocimiento.

Desde su aparición, los medios informativos se ganaron el galardón como el “cuarto poder”. No exagero al decir que, con su influencia, inducían a la gente para que votara por tal o cual candidato. Su poder de penetración llevó a la gente a decir: “lo vi en la tele, lo escuché en el radio”, etc. Dando por hecho que, si ahí había sido dado a conocer, entonces era verdad.

Si usted duda, solo ubíquese en tiempo presente, la pandemia hoy endemia, nos la han repetido hasta el cansancio, que hasta algunas personas salen mal con sus amistades, por defender lo señalado en los medios. La población se ha dividido, entre los que dudan, piensan, investigan, y los que confían en las verdades a medias, de los medios. La gente se ha muerto en vida y no asoman ni su bendita nariz a la calle, pensando que al interior están seguros, olvidan que el encierro de un espacio contamina el aire, lo vicia. Olvidan que el miedo puede debilitar al sistema inmunológico y en consecuencia, vulnerar al cuerpo. Naturalmente, esa, esa es otra historia.

Hoy se sabe que los aceites ni son tan buenos y de la manteca, le comparto solo cinco de los muchos beneficios: es saludable para el corazón, “es muy buena para el corazón”, tiene propiedades antidepresivas, es mejor como grasa, que el aceite, es altamente nutritiva y finalmente es genial para los huesos. Sí, leyó usted bien, las anteriores son sus bondades, mismas que en el pasado, las usaban como agravantes. La manteca está libre de azúcares y grasas trans; es rica en calcio, vitamina B, C y D; y tiene bajo contenido en sodio, contiene además ácido oleico, ácido palmítico, ácido esteárico, y ácido linoleico. Tan solo por señalar un ejemplo, le diré que es más saludable que el aceite de girasol o canola y otros.

Agregaré que la manteca de cerdo es en un 60% grasa monoinsaturada, la misma que hace que sean buenos el aceite de oliva y el aguacate. El Dr. Michael Mosley, publica en la BBC una investigación que señala el hecho de que cuando las grasas y los aceites se calientan, cambian, y al hacerlo producen sustancias químicas que pueden causar enfermedades cardíacas y cáncer. Así que es conveniente regresar a lo verdaderamente natural, ya en otro momento le platicaré de los cubos de “pollo”, tal vez no le agrade saber que, bueno se me acabó el espacio por hoy.

ABUELITAS:

Recordará usted apreciado leyente, que miembros de Feparmex, Club de Reporteros de Colima, Club Primera Plana Capítulo Colima, Abogados Académicos Independientes, así como periodistas de Colima, Villa de Álvarez, Tecomán, Armería y Manzanillo y periodistas independientes. Presentaron una inconformidad ante la comisión estatal de derechos humanos, en contra de reformas realizadas a la Ley para la Protección Integral del Ejercicio Periodístico del Estado de Colima. Dicha queja ha sido recibida y es atendida ya, por la comisión, según da a conocer el titular de dicha dependencia.  Ojalá fructifique y sea para bien del gremio periodístico. Es cuanto.