Nadie se ha hecho
pobre por dar.
Ana Frank.
Por: Manuel Olvera Sánchez.
Las elecciones pasadas dieron testimonio de que cuando existe una oposición unida y fuerte aseguran coartar a un totalitarismo gubernamental que a través de dadivas como lo son los programas sociales se satisfacen de manera mediática diversos requerimientos de la sociedad sin atacar de fondo temas fundamentales para un crecimiento económico integral.
Vale recordar que fue en el año de 1997 cuando de manera democrática los capitalinos tuvieron la oportunidad de elegir a través del voto a la persona que dirigiría los destinos de la ciudad de México, recayendo esta responsabilidad en la persona del Ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solorzano, abanderado por el Partido de la Revolución Democrática (PRD).
Tuvieron que pasar 24 años, o sea, 4 jefes de gobierno: Cuauhtémoc Cárdenas Solorzano 1997-2000(PRD), Andrés Manuel López Obrador (AMLO) 2000-2006(PRD), Marcelo Ebrard Casaubon 2006-2012(PRD), Miguel Ángel Mancera 2012-2018 y Claudia Sheinbaum a partir del 2018 por el partido Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), es decir, el totalitarismo partidista era una realidad, lo cual nunca se imaginaron que lo perderían de manera abismal.
Lo anterior es una evidencia de que el respaldo a las políticas sociales para con los capitalinos llevadas a cabo por los jefes de gobierno de la Ciudad de México fueron una estrategia mediática a través de las cuales aseguraban el respaldo de la sociedad en cada temporada electoral, sin embargo, hoy en día observamos que esos tiempos del totalitarismo electoral ha pasado a la historia, los capitalinos le han apostado a la alternancia como una forma de que cambien las políticas económicas, que no es a través de abrir las llaves de las arcas nacionales para implementar políticas públicas que no contribuyen a un desarrollo económico integral y sustentable.
No bastaron los programas sociales que se implementaron desde la administración del Ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solorzano y que hoy en día se han visto incrementados con al actual gobierno federal para lograr una victoria aplastante como solía ser en la Ciudad de México, sin embargo, una realidad es que el corporativismo al cual estaban acostumbrados y que les valía para lograr ganar elecciones hoy en día es cosa del pasado.
Y de lo anterior da testimonio que de las 16 alcaldías que estuvieron en disputa 09 fueron ganadas por la coalición integrada por el Partido Acción Nacional (PAN), el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y MORENA logro 07 alcaldías. La oposición le arrebato al partido del presidente de la república seis alcaldías que en el 2018 habían ganado con gran margen, incluso la alcaldía de Tlalpan en la cual vive la jefa de Gobierno de la Ciudad de México Claudia Sheinbaum sufrió un descalabro al perderla.
Lo anterior es un duro golpe político a MORENA ya que alcaldías claves como Cuauhtémoc y Miguel Hidalgo hoy en día le han sido arrebatadas, lo anterior es un escenario preocupante para el partido del presidente de la república y para su partido, ya que la mitad de la capital del país estará gobernada por la oposición y máxime que en el 2024 se llevaran a cabo elecciones para elegir al próximo presidente de la república, el senado y el congreso de la unión.
Vale recordar que el presidente de la republica Andrés Manuel López Obrador ha arreciado sus señalamientos en contra de la clase media, de lo cual es entendible su malestar ya que independientemente de que perdió nueve alcaldías de las cuales seis de ellas eran gobierno, es en esas demarcaciones donde la clase media se encuentra asentada, pero no solo ahí vive la clase media, también se encuentran zonas exclusivas como Polanco y Lomas de Chapultepec, así como los grandes corporativos empresariales como lo son las torres de Santa Fe.
Todos tenemos derecho a vivir mejor, a ser ambiciosos, a procurar lo mejor para nuestra familia, sin embargo, al compartir esa filosofía es algo que le molesta a AMLO, olvida que el a través de 18 años ambiciono ser presidente de la república y fue precisamente esa ambición de lucha permanente que lo llevo a lograr el triunfo electoral para llevarlo al puesto de poder más importante existe en nuestro país como lo es ser presidente de la República.
Al parecer, quienes no comparten su forma de gobernar son corruptos, quienes no comparten su visión de gobierno son quienes apoyan a gobiernos corruptos, al no darle continuidad a sus ideales son manipulables; AMLO olvida que ese pueblo generoso como lo son los capitalinos tan solo en el año 2019 generaron el 16% del producto interno bruto, siendo la ciudad que mayor porcentaje aporta a la riqueza generada en el país, por encima de Nuevo León, Jalisco y el Estado de México.
La visión que tenías sobre mí, no la defraudare, eso me fortalece aún más, serás ese impulso para lograrlo.
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