Por: Gustavo López Solórzano
Los sueños no siempre se hacen realidad, pero no porque sean demasiado grandes o imposibles… sino porque nosotros dejamos de creer en ellos. Martin Luther King.
Desde 1996 varios países han adoptado lo que se conoce como alerta AMBER, tristemente hace referencia a una niña brillante de nueve años que fue secuestrada (encontrada sin vida) mientras montaba en bicicleta en Arlington, Texas, de nombre Amber Hagerman. Según expertos de otros países; las primeras horas son vitales, de ahí la necesidad de que la alerta sea emitida lo antes posible. En estos casos, los medios de información como la radio, la televisión, la prensa escrita y virtual, las redes sociales, telefonía móvil, incluso pantallas electrónicas, juegan un papel sumamente importante.
Cuando participo como maestro de ceremonias en algún evento masivo que implica la asistencia de menores, acostumbro sugerir insistentemente a los padres de familia que cuiden a sus niños, que los agarren bien. Reiteradamente he sido testigo de la preocupación, angustia y desesperación que viven aquellos padres que se descuidaron solo unos segundos y perdieron a su hijo o hija. ¿Sabía usted que tan solo del 2007 al 2011, alrededor de 150,000 personas (entre ellos niñas, niños y adolescentes) fueron secuestradas en México? Esta y otros lamentables sucesos motivaron a nuestro país para que en el 2012 se sumara a otros países con la puesta en marcha del protocolo para la alerta AMBER.
Obviamente el objetivo de esta alerta es poder encontrar y recuperar a los menores que hayan sido víctimas de una acción como esta, con vida y en lo posible sin daños físicos. La Alerta AMBER tiene el propósito de cambiar las estadísticas de forma positiva, los estudios que se han realizado acerca de este tema demuestran que cuando los ciudadanos se convierten en los ojos y oídos de las agencias policíacas, es posible salvar vidas preciadas. Naturalmente y contrario a lo que muchos padres consideran, la alerta AMBER requiere de ciertos requisitos para ser activada.
La visión humanista del gobierno estatal, ha permitido que Colima se sume desde mayo del año pasado a esta importante y trascendente actividad en pro de la vida. En complemento, cuando la alerta no se justifica con base a los criterios establecidos, se utiliza una Prealerta con la misma infraestructura de Alerta AMBER, pero sin incluir la participación de los medios a fin de poder apoyar a quienes así lo requieran. Naturalmente las acciones gubernamentales además de la coordinación interinstitucional, requieren la participación de la sociedad para que lleguen a buen puerto y con ello, sigamos haciendo del nuestro, un mejor lugar para vivir.
Finalmente le comparto algunas sugerencias internacionales para el cuidado de sus menores, evite soltar a los niños, enseñarles a no hablar con extraños y no recibir nada de ellos, evite dejarlos salir a la calle solos, no dejar entrar a cualquiera a la casa, incluso en campañas de vacunación. Todo el personal de gobierno que está participando a cabo en una campaña de cualquier tipo, debe tener una identificación de buena calidad con marcas de agua y seguridad, no permita que cualquier persona tome fotografías de sus hijos, incluso en fiestas infantiles, pida que le digan quien es el fotógrafo registrado para dicha fiesta o evento escolar, tenga siempre fotografías recientes de sus niños. La responsabilidad del bienestar familiar empieza en casa. Es cuánto.